Agentes de la Policía Local detuvieron el jueves a dos jóvenes, de 18 y 17 años, vecinos de la ciudad, como sospechosos de haber cometido un robo en los trasteros de un edificio situado en la calle Miramar-Castrillon. El incidente tuvo lugar a las dos y media de la de madrugada y fueron descubiertos gracias a que uno de los residentes escuchó el ruido que producían al forzar las puertas de varios trasteros. Los patrulleros localizaron a los sospechosos en las inmediaciones con el material robado, así que fueron arrestados.

Según parece, el denunciante ya sospechaba de los jóvenes cuando alertó a las autoridades de lo que estaba ocurriendo, e informó a los policías de que posiblemente eran los responsables del ruido. Pero no fue hasta que los agentes llegaron al lugar y comprobaron que las puertas habían sido forzadas que procedieron a buscar a los sospechosos

Al revisar las inmediaciones, los agentes descubrieron en un solar contiguo al edificio que alguien había arrojado a su interior varios de los objetos que habían desaparecido de los trasteros: básicamente, aparatos electrónicos. Cuando localizaron a los dos sospechosos, aún muy cerca del edificio robado, resultó que llevaban encima piezas del mismo equipo electrónico, así que había pocas dudas de su culpabilidad. Cuando los policías preguntaron a los adolescentes de donde lo habían sacado, no supieron qué responder, así que los arrestaron después de informarles de sus derechos.

Delincuencia juvenil

No es el único delito que implica a un menor que ha tenido lugar últimamente en la ciudad. De hecho, vecinos de Novo Mesoiro protestaron esta misma semana por varios robos que han sufrido en garajes comunitarios y que atribuyen a una pandilla juvenil, con varios menores en sus filas, que residen en pisos de protección oficial en la calle de Ribeira Sacra. Entre los delitos que les achacan se incluyen robos en coches o sustracción de motos.

Al respecto de, concejal de Seguridad Ciudadana, Juan Ignacio Borrego, se limitó a decir que, “como en cualquier barrio o en cualquier zona concreta en el que se detecte que hay mayor necesidad de vigilancia, aplicaremos en total coordinación con la Policía Nacional las medidas y refuerzos que hagan falta para amortiguar esa situación”.

Borrego aprovechó para recordar que las competencia de Seguridad Ciudadana son responsabilidad de la Policía Nacional, aunque la Policía Local muchas veces intervenga en estos casos. “Este tipo de delitos normalmente exigen una investigación”, señaló el concejal.