El Ayuntamiento prepara un modificado de crédito, es decir, un cambio en los presupuestos de este año, con lo que ya será el sexto. Desde el verano se han ido acumulando dichas modificaciones por toda clase de motivos, y ahora le toca el turno al M6. Todavía se sabe poco de él, pero probablemente incluirá una inyección económica en la Escuela Municipal de Música (como pretende el BNG). Fuentes cercanas añaden a la Ciudad de las TIC y para pagar, por lo menos en parte, la enorme deuda que el Ayuntamiento mantiene con la Compañía de Tranvías.
Por el momento, el Gobierno de Inés Rey está negociando este modificado con el BNG, dado que, al encontrarse en minoría (cuenta con un concejal menos que el PP) necesita los votos de los nacionalistas para sacarlo adelante. Esto no siempre es fácil, sobre todo porque también se están negociando los presupuestos del próximo año y el BNG se negó a hacerlo hasta que se le presentara un borrador y un informe sobre la ejecución de los acuerdos a los que había llegado con el PSOE. Los nacionalistas tienen fresco en la memoria el ejemplo de la Marea, que apoyó al PSOE en el anterior mandato y que alegaba que los socialistas incumplían los acuerdos. En diciembre del año pasado consiguieron aprobar a tiempo las nuevas cuentas, todo un hito para un gobierno en minoría en A Coruña.
En junio, el BNG ya amenazó con no aprobar el primer modificado de crédito (M1), de siete millones de euros, que iba destinado a pagar parte de la deuda a Tranvías (el Ayuntamiento paga cada año millones a la empresa por la rebaja de los billetes de bus) por 3,7 millones de euros y también al Instituto Municipal Coruña Espectáculos (IMCE), al que destinaba 3,3 millones para que abonara los gastos de las fiestas de verano del año pasado. El portavoz del BNG, Francisco Jorquera, tachó la situación de “escandalosa”.
La segunda modificación de crédito no generó ninguna polémica ni hubo alegaciones porque se trataba de un simple cambio en un convenio existente con la Real Academia Galega de Medicina. El mes pasado se dio a conocer el M3. Giraba en torno a las obras de Los Cantones, uno de los proyectos más importantes del Gobierno local para este mandato y era necesario porque el Ayuntamiento había decidido no costear las obras con la venta de solares de propiedad, sino mediante un crédito. Esta operación, de 5,4 millones de euros, también debía financiar la mejora del parque de Santa Margarita.
Luego llegó el turno del M4, en el que se incluían 140.000 euros del Festival Womex, otros 1,63 millones de euros para pagar las rebajas del bus, y 2,3 millones d euros para facturas que el PP califica de “irregulares” porque pertenecen a gastos que deberían haberse sacado a licitación, como 560.000 euros de Deportes, o 1,57 millones de euros por tratamiento de basura (Nostián se encuentra sin contrato desde 2019). El PP denunció entonces que el dinero se sacó de la reparación de vías públicas (dos millones de euros) o de la renta social (600.000 euros).
En el pleno de octubre se votó el M5, que incluía más de 400.000 euros para el convenio con la UDC para las obras de la Ciudad de las TIC, pero la deuda total es de 2.426.000 euros, así que se espera que el próximo modificado la reduzca aún más, igual que ocurre con la de Tranvías.
Por otro lado, el portavoz del PP, Miguel Lorenzo, insta a Inés Rey a presentar el proyecto de presupuesto municipal para 2025, “porque casi estamos en noviembre, nadie tiene ninguna noticia de su estado de tramitación y los plazos se echan encima para que entren en vigor el próximo uno de enero, a pesar de que el presupuesto es la norma más importante de un Gobierno porque es el documento que recoge sus propuestas con las que pretende mejorar la vida de los ciudadanos”.
Lorenzo destaca que “escuchamos a la alcaldesa hablar del presupuesto de la Xunta para la ciudad, pero no pueden hablar del próximo presupuesto municipal porque Inés Rey aún no ha movido ni un papel para aprobarlo en tiempo y forma”. Como ocurre, añade, con el nacional.