El Ideal Gallego del 10 de marzo de 1999 llevaba a su portada que la comarca coruñesa regresa a la normalidad tras el diluvio; la detención de siete etarras causa incidentes en Euskadi; la patronal del transporte no negociará si no hay servicios mínimos; Pérez Touriño aplicará al pie de la letra la norma sobre incompatibilidades; las líneas aéreas que operan en Galicia se asociarán para unir esfuerzos; y Vázquez pide un debate de toda Galicia sobre la Ciudad de la Cultura.
Más de 144 litros por metro cuadrado se registraron en las treinta primeras horas de lluvia incesante que se cumplieron a las dos de la tarde ayer y que mantuvieron el caos en la ciudad. La central de la Policía Local se declaraba absolutamente colapsada a causa de los cortes de tráfico en los accesos. El desbordamiento del río Monelos alcanzó la avenida de Alfonso Molina a la altura del concesionario de coches Louzao, por lo que varios carriles tuvieron que ser cerrados al tráfico durante horas. (...) Entre los incidentes más graves se encuentra un desprendimiento de tierras en la avenida del Pasaje (...) que hizo que el montón de tierra acumulada por las obras de los accesos cayese sobre la calzada entre el Materno Infantil y el Juan Canalejo. (...) Efectivos de la Policía Local tuvieron que retirar 18 coches estacionados en el aparcamiento inferior del hospital Juan Canalejo. (...) En Eirís la parte posterior de una casa se desprendió a las cuatro de la tarde.
Inundaciones, atascos y desprendimientos de cascotes paralizaron ayer la actividad académica en algunas zonas de la ciudad. Aunque las clases no fueron oficialmente suspendidas, las condiciones meteorológicas y las perspectivas de quedarse atrapados durante horas en medio del tráfico llevó a muchos estudiantes a tomarse un justificado día libre. Los centros educativos más afectados por las persistentes lluvias fueron el instituto de educación secundaria Eusebio da Guarda, localizado en la plza de Pontevedra, y el colegio Alborada, en la segunda fase del polígono de Elviña. En el primero de ellos, la dirección se vio obligada a anular la docencia en las aulas del segundo piso, debido al hundimiento de un techo durante una clase del horario nocturno. (...) El colegio Alborada tuvo que cerrar sus puertas a todos los estudiantes debido a la inundación sufrida en la planta baja.
El desbordamiento del río de Monelos, que comenzaba a manifestarse a últimas horas del lunes, era ya un hecho a primeras horas de ayer. El área circundante de la Mercedes en Someso y Mesoiro amaneció convertida en un enorme charco. El agua, que se fue extendiendo en toda el área, invadió desde primeas horas la avenida de Alfonso Molina, por lo que sólo dos carriles, uno en cada sentido de circulación, quedaron abiertos al tráfico.
Hace 50 años |
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