El reto de la hostelería y el ocio nocturno de superar los históricos guarismos de 2022 de momento no resiste la comparación. A pesar de que todos los factores son favorables (el tiempo, el horario ampliado y un mayor número de clientes), en la ecuación falla precisamente todo lo que no depende de los profesionales. Y es que en los primeros quince días de licencia especial el ticket medio ha decredido alrededor de un 15 por ciento respecto al pasado año, según estimaciones de los hosteleros. 

Es precisamente ese horario ampliado, el más largo concedido nunca por el Ayuntamiento y que se extenderá hasta el mes de septiembre, el que ha aliviado la caída y el que mantiene el optimismo y la lectura positiva, según asegura Héctor Cañete, presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de A Coruña: “Hay gente, pero el gasto es más contenido. La gente está muy contenta con el horario ampliado, porque es fundamental para aumentar los ingresos, pero los turistas han venido de vacaciones mirando el espejo retrovisor”. En ese sentido, Emilio Ron, del Cine París, apuesta por la liberalización total de los horarios.

En el epicentro y la postal de la ciudad se deja notar esa tendencia, siempre dentro de un contexto todavía muy positivo. “Hay mucho volumen de trabajo, pero no se deja notar tanto en la caja como otros años; aún así, no tenemos queja alguna”, explica Alberto Boquete, presidente de los hosteleros de la zona. “El turismo nacional se nota mucho por el tema de refugiarse del calor y nos da mucha vidilla”, añade.

Puente y ocio nocturno 

Desde el inicio del Noroeste el pasado miércoles el ocio nocturno vive una semana entera de aperturas, con la llegada de la Batalla Naval y un puente largo. “El consumo es más moderado, pero esta semana es buena tanto para Riazor como para la zona del puerto”, explica Luis Diz, presidente de Galicia de Noite. 

Por su parte, Carlos Pereiro, de Studio 54 en el Orzán, habla de picos altos y bajos la coincidencia con fiestas y festivales.