El centro tecnológico ITG invertirá 3 millones de euros hasta 2026 en el desarrollo de soluciones de ciberseguridad para prevenir ataques informáticos o mitigar su impacto. En este sentido, y como parte de la apuesta del centro tecnológico en este ámbito, ITG y la multinacional DEKRA han llegado a un acuerdo para trabajar conjuntamente en certificar la ciberseguridad.
En palabras de Carlos Calvo, director general de ITG, “en 2024 se batió el récord histórico de ciberataques en España, que son cada vez más precisos debido a la utilización de la IA, por lo que se hace imprescindible desarrollar soluciones tecnológicas eficientes para garantizar la protección de la información e impedir la manipulación de datos y sistemas. En ITG llevamos tiempo trabajando en el ámbito de la ciberseguridad en diversos sectores, y ahora reforzamos esta apuesta respondiendo a las nuevas necesidades del sector industrial”.
ITG consolida un acuerdo estratégico con DEKRA, firmado esta mañana en la sede del centro tecnológico en A Coruña por el director general de ITG, Carlos Calvo, y el director de ciberseguridad global de DEKRA, Rubén Lirio. Fruto de esta nueva alianza, las dos entidades trabajarán conjuntamente en el diseño y desarrollo de un sistema de certificación y acreditación frente a las ciberamenazas. De este modo, se conseguirá determinar el nivel de protección y se proporcionará un valor añadido cuando la seguridad sea crítica.
El director general de ITG destaca que esta alianza, en el marco de su inversión en ciberseguridad, “refuerza la apuesta de ITG por las tecnologías de uso dual, al buscar su aplicación tanto en el sector civil como en el ámbito de la Seguridad”. Se trata de un campo en el que ITG colabora, por ejemplo, desde hace tres años, con la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa. “Una de las aplicaciones de este sistema de certificación en el que trabajamos junto a DEKRA”, señaló, “será la acreditación de la robustez de los drones frente a las ciberamenazas”.
Por su parte, Rubén Lirio, director global de ciberseguridad de DEKRA, afirmó que “los vehículos aéreos no tripulados van a formar parte de nuestras vidas revolucionando sectores como la distribución, el ocio e incluso el transporte. Es fundamental que estas soluciones salgan al mercado cumpliendo con criterios mínimos de ciberseguridad”.
Estos trabajos se enmarcan en una iniciativa que cuenta con financiación de los fondos NextGeneration-EU y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia a través del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE).
Otra de las líneas de trabajo de ITG en ciberseguridad es el desarrollo de una unidad móvil para caracterizar y auditar el espacio aéreo en zonas concretas (aeropuertos, ciudades, infraestructuras críticas o grandes eventos) y de forma temporal. El objetivo es capturar datos del entorno para crear herramientas, pruebas y procedimientos que contribuyan a un espacio aéreo más seguro en términos de ciberseguridad.
Cuando esté operativo, en el primer semestre de 2026, este laboratorio móvil permitirá, entre otras cosas, monitorizar el tráfico aéreo tripulado y no tripulado, caracterizar el espectro radioeléctrico de la zona, e identificar señales e interferencias. Posteriormente, hará una clasificación de señales, interferencias, amenazas o niveles de penetración, para establecer pautas de optimización con IA. Todo ello forma parte de una iniciativa en colaboración con la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia (AMTEGA) con fondos NextGeneration-EU y del PRTR a través del INCIBE.
Para hacer frente a los ciberataques más avanzados y garantizar la seguridad de las comunicaciones, ITG ha dado un paso adelante al integrar tecnología cuántica en sus estrategias de ciberseguridad. A través de tecnología QKD (Quantum Key Distribution) y modelos avanzados de cifrado que incorporan algoritmia postcuántica, el objetivo es extender las comunicaciones más allá de las limitaciones de distancia actuales que tiene la tecnología. Para lograrlo, el centro tecnológico desarrolla sistemas de gestión de claves cuánticas (KMS) y aplica criptografía postcuántica para interconectar diferentes nodos QKD aislados creando así una red de comunicación cuántica más amplia y robusta.