Una tienda de la calle Real sufrió en la madrugada de ayer uno de los robos con fuerza más graves registrados en la ciudad en lo que va de año: el Enxebre vende artesanía y del escaparate que fue hecho añicos desaparecieron cerámica y joyería de plata por valor de 3.000 euros, según la dueña del establecimiento. Es un importe mucho mayor de lo que suele robarse en robos con fuerza en establecimientos, según confirman fuentes policiales.
“Fue a las seis de la madrugada, Una chica que trabaja aquí al lado y entra temprano se encontró todo el pitote”; explica la dueña, Marita Gago. El establecimiento cuenta con dos escaparates, pero los ladrones solo rompieron uno. Aunque se ignora la autoría del delito, se sospecha que fue más de uno, porque las cerámicas de Regal que se llevaron son bastante voluminosas, son contar la artesanía de plata.
602 delitos
de robo con fuerza registraron las autoridades en A Coruña durante el año pasado y 393 fueron en domicilios
A primera hora de la mañana acudió la Policía Judicial y la Científica, y poco después, el cristalero, que sustituyó el vidrio roto, de manera que pronto el local pudo volver a la normalidad. A media mañana, todavía estaban tratando de limpiar los restos. “Los ‘polvos mágicos’ de la Científica, los que usan para las huellas dactilares, estaban por todas partes”, explicaba la dueña, que se muestra resignada por lo ocurrido: “¡Qué le vamos a hacer! Ya estás mal y encima te pasa esto”.
Hay que señalar que en muchos de los robos con fuerza el botín apenas se reduce a unos cientos de euros, en el mejor de los casos. Por ejemplo, en un robo cercano, que tuvo lugar el domingo quince de este mes en la calle San Agustín, se rompió un escaparte y se llevaron bisutería, pero de muy escaso valor, según los testigos.
Precisamente ayer la Jefatura Superior de la Policía Nacional anunciaba la detención de un hombre de 35 años de edad con varios antecedentes en su haber al que las pesquisas del Grupo de Investigación del Distrito Sur le achacan varios robos con fuerza en el barrio de Elviña o sus cercanías. El primero de los robos ocurrió el pasado año, en la noche del 23 al 24 de septiembre, cuando un hombre forzó la puerta de acceso a una caseta de obra, y consiguió llevarse dos ordenadores portátiles, así como diverso material informático y documentación. Cinco días después, el mismo sospechoso habría roto la ventana de un complejo deportivo, también de noche, aunque esta vez solo habría conseguido llevarse unas llaves de una caja de caudales.
El 29 de abril volvió a actuar, esta vez en una casa de la zona de O Martinete, en la que se coló por una ventana. Era de noche, y los moradores del inmueble se encontraban durmiendo en el interior mientras robaba. En esta ocasión, se llevó 300 euros, un reloj y documentación. El último robo tuvo lugar también durante la noche del día uno del presente mes, en un despacho del campus universitario de Elviña, donde, se coló por una ventana para llevar material informático. Fue finalmente localizado y detenido el día 19, ordenando la jueza su ingreso en prisión.