Después de más de 55 años unida al tráfico portuario de A Coruña, Repsol apuesta definitivamente por prorrogar la relación vinculada al Puerto Exterior. La empresa se encuentra actualmente en el desarrollo del proyecto de traslado de operaciones de crudo, al que destina 126 millones, lo que supone además una de las inversiones más importantes comprometidas por el sector industrial en Galicia. La expectativa es que la nueva terminar de crudo esté lista para su utilización antes de la finalización de 2022.

Las nuevas instalaciones logísticas en Punta Langosteira, además de permitir el traslado de la descarga de crudo, también se convertirán en el punto de partida para dar soporte a nuevos tráficos de materias primas. En ese sentido, A Coruña Green Port es una iniciativa impulsada por la Autoridad Portuaria y ya presentada al Gobierno de España para optar a los fondos Next Generation de la Unión Europea. Resulta clave para la descarbonización de la economía y el impulso de la digitalización.

Casi un centenar de empresas auxiliares están contratadas para la construcción del proyecto de traslado de crudo al puerto exterior. Son cuatro los bloques principales.  

La obra marina del pantalán ya finalizó en 2021 y engloba el diseño, suministro, construcción y puesta a disposición de un pantalón de 520’ metros. Para este bloque se cifran 35 millones de euros. Más del doble, 80, tienen de presupuesto el poliducto y las instalaciones auxiliares de Langosteira. Además, se han concluido todas las fases del plan de conservación de los petroglifos.

Las instalaciones auxiliares ubicadas en Langosteira incluyen la instalación de otros 3 kilómetros de tuberías y están prácticamente acabadas. Las modificaciones en refinería, por su parte, se llevan 7 millones del presupuesto total.