La ronda de Outeiro, una de las calles más largas de la ciudad, de cinco kilómetros de largo, está, desde ayer, libre de graffitis. Así lo anunció la concejala de Medio Ambiente, Esther Fontán, que aseguró que algunas partes de la ronda, en sus 400 números, ya están limpios: “Hay paredes que relucen, no hay más que ver la entrada del parque de Adolfo Suárez, o las esquinas de la rotonda del Pavo Real, que son tan visibles”. Los últimos en desaparecer fueron los que se encontraban en el cruce de la avenida del Ejército, y que los operarios raspaban ayer de las paredes
350 calles
han sido limpiadas de pintadas en los nueve meses que lleva activa la Oficina Virtual de graffitis de la Concejalía de Medio Ambiente
Lo cierto es que, a pesar de ser una calle larga, la ronda de Outeiro no tenía muchas pintadas, puesto que es también muy transitada. La mayor parte de las veces, los operarios se encontraban con simples firmas “tag” realizados con aerosol. La concejala calcula que pueden que haya tenido que realizar del orden de 200 intervenciones, lo que no es mucho dado el tamaño. Mucho más complicado fue sanear las paredes del a Ciudad Vieja, algo que se consiguió en junio de 2021, y en donde el servicio de limpieza tuvo que tener cuidado para no dañar la fachada de las casas históricas con métodos abrasivos. Porque no en todas las paredes se puede usar las mismas técnicas.
Fontán recordó que el servicio de limpieza lleva casi nueve meses de campaña activa y en esta situación de limpieza y hemos 2.250 intervenciones en más de 350 calles en paredes, bajantes, papeleras y mobiliario urbano y casi 500 contenedores. “Se va a ir a todos los distritos de la ciudad”, prometió Fontán.
Sobre este punto, la concejala señaló que a menudo hablan con los grafiteros y consiguen incorporarlos a la fase activa de limpieza “e incluso ayudan a darle clase a los jóvenes. En San Roque nos han hecho un mural precioso e invitamos a los jóvenes a que nos llamen para hablar con ellos”. Fontán prometió escuchar sus propuestas para zonas abandonadas y que pueden necesitar una mano de pintura para mejorar su imagen.
500 contenedores
de basura fueron tratados con agua y productos químicos para borrar todos los garabatos y pintadas que los afeaban
Ahora toca mantener las paredes limpias en las zonas por las que ya ha pasado el equipo de limpieza. En eso el gobierno local se muestra tajante. “No es arte urbano, es un acto vandálico”; declaró la edil en un programa radiofónico. Para conseguir este objetivo, añadió, “la colaboración ciudadana es muy de agradecer”. Primero, porque alertan de pintadas de carácter ofensivo o, simplemente, poco estético y después porque, una vez limpia la pared, alertan de si vuelven a ensuciarla, como señaló la concejala de Medio Ambiente. Pero también los inspectores de Medio Ambiente recorren las calles, así como la Patrulla Verde de la Policía Local.
750 euros
es el importe de la multa que puede llegar a imponerse a alguien al que se le sorprende pintado paredes, siempre que no sea reincidente
En junio de 2021, Fontán presentó la oficina virtual, una iniciativa pensada para combatir el problema de las pintadas a la que los vecinos podrán avisar a través del 010 o de oficinavirtualgraffiti@coruna.gal. Debe aportarse la localización exacta y, si es posible, una fotografía. Fontán promete que si estas reaparecen, se eliminarán en 48 o inmediatamente, si su contenido es “ofensivo”.