La temperatura, como todo, depende de los gustos. Sin embargo, los datos están ahí: A Coruña vivió un invierno ligeramente más cálido de lo normal, medio grado por encima de la media. Y el día más cálido de todos fue el 14 de febrero. En efecto, en San Valentín, el termómetro subió hasta los 21 grados. Si fue por motivos atmosféricos o porque el amor estaba en el ambiente, eso es también una cuestión de opiniones.

En cuanto al día más frío, también se registró en febrero. Concretamente, el día 24. La Aemet (Agencia Española de Meteorología) presentó en la mañana de ayer los datos relativos al último trimestre. El meteorólogo Rafael Sánchez señaló que no ha habido ningún período que haya batido ningún récord de más frío o más lluvioso. Eso sí, el mes de diciembre del mes pasado el quinto más cálido de la serie del observatorio de A Coruña. Es un dato significativo si se tiene en cuenta que los datos se remontan a 1932.  
 

Un 13% más de lluvia   

En cuanto a las precipitaciones, el invierno ha resultado ser más húmedo de lo que habría sido posible adivinar después de un otoño bastante seco. De hecho, ha caído un 13% más de lluvia de lo normal, según los pluviómetros de la Aemet. Sobre todo, las precipitaciones se han concentrado a finales del año pasado, trayendo una Navidad pasada por agua. Es decir, que diciembre y enero fueron los meses más lluviosos. 
 

Por el contrario, febrero fue extraordinariamente seco, de manera que solo cayó el 38% de la lluvia que es normal a estas alturas del año. En total, fueron 389 litros los que se recogieron en todo el invierno, pero el día más lluvioso fue sin duda el 23 de diciembre, cuando los pluviómetros rebosaron con 73 litros. 
 

En lo que va de mes, a nivel autonómico se mantiene la tendencia a la sequedad que se registró en febrero, sobre todo un 30% en A Coruña, mientras que en el sur es un 50%. Esta tónica se ha roto en los últimos días, las lluvias por le momento se mantienen por el momento en medidas próximas a las normales.