Solo hace tres meses que Ana Pacheco abrió su tienda en la Estrecha de San Andrés, y ya ha sufrido un duro golpe: a las cinco de la madrugada de ayer, alguien empleó una tapa de alcantarilla para romper el escaparate. Una vez en el interior se apoderó de varias prendas (unas diez) y complementos así como la caja registradora y todo su contenido. "Todavía no he hecho recuento de todo lo robado, pero en la caja había 150 euros", explica.
Pacheco se enteró de lo ocurrido a las seis de la mañana, con una llamada de la Policía Nacional. A media mañana hizo acto de presencia una agente de la Científica, que se encargó de tomar las huellas. Incluida la tapa de alcantarilla, que aún se encontraba en el interior cuando llegó la propietaria.