Se cumple un año desde que Alu Ibérica se cerró definitivamente, después del escándalo que siguió a la intervención policial en la que se detuvo a varios directivos, acusados de vaciar la empresa de activos. "Ellos están en libertad con cargos y nosotros aquí, a punto de terminarse la prestación por desempleo", denunció el portavoz de los extrabajadores, Juan Carlos López Corbacho. Para denunciar esta situación, unos treinta trabajadores cortaron el tráfico en Juan Flórez, frente a las oficinas del administrador concursal.
El corte de tráfico se hizo efectivo a las 12.20 horas, y obligó a la Policía Local a desviar la circulación por la calle de Enrique Dequidt mientras la Policía Nacional vigilaba la protesta. La situación se prolongó por espacio de veinte minutos, mientras los trabajadores coreaban consignas exigiendo soluciones. Corbacho señaló el abandono del Fogasa, que todavía no ha repartido las indemnizaciones, y recordó que la situación no es la que prometió el Gobierno, que había garantizado la continuidad de la fábrica y empleo de calidad.