El cambio de modelo de Nostián preocupa, y mucho, a varias entidades, de la ciudad, entre ellas diez asociaciones vecinales que se han unido en la plataforma Nostián con futuro. No quieren un quinto contenedor (el de envases ligeros) en sus calles, sobre todo si el cambio de modelo es menos eficiente, así que piensan iniciar una campaña de movilizaciones empezando por una recogida de firmas. 

El objetivo es presionar al Gobierno de Inés Rey para que solicite la excepcionalidad. Es una medida que se acordó en pleno por unanimidad y consiste en solicitar que se haga una excepción con Nostián, y que se pueda seguir recogiendo la basura con el modelo de cuatro contenedores (orgánico, inorgánico, papel y cristal) por ser más eficiente y separar la basura en origen, tal y como exige la normativa europea, que consideran que cumple. 
 

Diez barrios 

En esta plataforma, a la que se han adscrito las asociaciones de Los Rosales, de Matogrande, de Elviña y Monte Alto, así como Agra do Orzán, por citar a unas cuantas, está encabeza por la entidad ecologista Adega, e incluye también a la Comisión Aberta en Defensa do Común. Conviene recordar que hace dos semanas, celebraron una mesa redonda sobre el tema al que invitaron a varios expertos, así como al Gobierno local, a asistir.
 

La concejala de Medio Ambiente, Noemí Díaz, anunció su participación, pero la canceló más tarde por “problemas de agenda”. Ningún miembro del Gobierno local la sustituyó, de manera que el debate pareció algo cojo, pero si algo quedó claro es que todos apuestan por el actual modelo. 
 

El problema es que el  Gobierno local no ha sabido explicar qué ventajas ofrece el nuevo, más allá de que hay que ajustarse a la normativa vigente, lo que es cuestionable, según varios expertos consultados. No solo eso: además de empeorar las cifras de reciclaje (como ocurre con la basura que envían otras localidades a la planta de Sogama), ocupará mucho espacio en las calles, lo que obligará a reducir las plazas de aparcamiento. 
 

Además, aumentará los costes del nuevo contrato de contenerización que la Concejalía de Medio Ambiente tendrá  que redactar, después de que una sentencia judicial declarara nulo el actual. Todo apunta a que este problema será uno de los más polémicos durante 2024.