Sin discrepancia alguna y con la intención de redoblar los esfuerzos de un primer año ya de por sí intenso, la directiva vecinal de la Ciudad Vieja sacó adelante una junta vecinal más centrada en lo que será el barrio en el futuro que en el balance en sí. Todo lo referente a actividades pasadas, futuras, cuentas y gestión de la directiva resultó una balsa de aceite después del primer año de mandato y los puntos se aprobaron por unanimidad.

Alrededor de medio centenar de residentes y socios de la Asociación de Vecinos Ciudad Vieja María Pita optaron por incrementar la propuesta cultural, uno de los ejes sobre los que ya giraron los movimientos en 2022. Además de mantener el magosto, unas intensas fiestas del Rosario o las sesiones de música navideña, se incorporarán a la programación una jornada especial con motivo del Día das Letras Galegas, así como una balconada.

Se trata de una iniciativa que ya se ha convertido en tradición cada dos años en el casco histórico de Betanzos. La intención es que los balcones luzcan con propuestas creativas de diferentes aristas, hasta el punto no solamente de cambiarle la cara al entorno, sino de convertirlo en un reclamo turístico en sí. “Queremos que los vecinos en este caso engalanen sus balcones con elementos artísticos decorativos, como en otras zonas del área”, afirma el presidente, Leonardo Méndez. “El objetivo es darle ornamento y que sirva de atractivo”, añade.

Seguridad y tranquilidad 
Es recurrente el matrimonio entre arte y reclamo cultural al que apuntan los vecinos de la Ciudad Vieja, y en esa fórmula también juega un papel fundamental el cómo esté concebido el barrio. “No se trata solo de peatonalizar, sino de dinamizar y dar contenido, que la gente venga a trabajar, a exposiciones o a actividades de todo tipo”, apunta el presidente.

Entre los asistentes también hubo turno para preguntar por el centro cívico y solicitar una mayor presencia policial, tanto por cuestiones de seguridad como de tráfico. “Un vecino se quejó recientemente de que no se veía un coche patrulla ni de lejos, que hace poco tuvo que llamar al 092 por un vehículo atascado y tardaron más de media hora”, explica Méndez.

Tampoco se libra del punto de mira vecinal la feria medieval, para la que la asociación advierte de que su caballo de batalla será “defender el descanso de los vecinos”.