Los vecinos de San Amaro realizaron ayer un acto de protesta contra la construcción en el polígono de San Amaro, que teme que desaparezca la llamada Fonte do Pincho, una fuente que surtía antiguamente de agua al barrio y que ahora está enterrada en una localización incierta. Sin embargo, desde la asociación aseguran que sí saben donde se encuentra la fuente y para demostrarlo, instalaron un letrero señalizador en donde los vecinos más ancianos la sitúan.
El BNG también apoyó esta iniciativa vecinal, que consideran importante para salvar lo poco que queda del patrimonio arqueológico de un barrio que ya ha perdido la mayor parte debido al desarrollo inmobiliario. Piden que la DIrección Xeral de Patrimonio tome cartas en el asunto.