La Junta de Gobierno local concedió este miércoles la licencia de primera ocupación para el edificio de viviendas sociales construido por la Xunta en el barrio de Xuxán. Este se encuentra en la parcela Z-11 y, según recordó la alcaldesa, Inés Rey, el inmueble iba a estar terminado en 2017, por lo que las obras llegaron a su fin seis años después. “El Ayuntamiento tardó tan solo 24 horas en conceder la licencia una vez que la Xunta presentó el último papel requerido. No se puede pedir más agilidad al Gobierno municipal. Ojalá hubiesen sido igual de rápidos en la Xunta”, señaló la regidora.
En la junta, el Ayuntamiento también aprobó iniciar los trámites para reclamar 14,1 millones a la UTE Albada, que gestiona la planta de tratamiento de residuos, cantidad que corresponde el sobrecoste que asumió el ayuntamiento por la gestión de los rechazos desde el 2011. Rey avanzó, a su vez, que será un procedimiento “largo y complicado”. “Llevamos años trabajando en el ámbito administrativo y judicial, también en el extrajudicial”, dijo. Al Gobierno local, apuntó, le avala una sentencia “que confirma que era la concesionaria quien debía asumir el coste del tratamiento de los rechazos”.
La regidora comentó que están dando pasos para avanzar en la gestión de la planta tras el acuerdo con la empresa concesionaria para “el sellado de los vasos”. Esto permitirá avanzar en el modelo de gestión y se licitará un nuevo contrato para la concesión “a finales de este año o principios de 2024”.
El Gobierno municipal autorizó la licitación del programa de Becas USA para el próximo curso 2024-2025, que permitirá disponer de un mínimo de 35 becas para cursar Primero de Bachillerato en Estados Unidos y que cuenta con un presupuesto de casi 650.000 euros. “Son cientos de jóvenes de esta ciudad los que gracias a esta beca no solo aprendieron un idioma, sino que gozaron de una experiencia vital única y mejoraron su formación conociendo otros sistemas educativos”, recordó Inés Rey.
Este año el Ayuntamiento mejoró la ayuda municipal para que el alumnado que participe en el programa disponga de ahorros, ayudando a sufragar a las familias el viaje a Madrid, lugar desde donde parte la expedición. Hasta ahora eran las propias familias las que asumían este coste.