La Diputación cobrará a partir de este año más de dos millones de euros a Audasa, concesionaria de la autopista AP-9, en concepto de IBI (Impuesto de bienes inmuebles) por la explotación de la vía de alta capacidad. La recaudación se repartirá entre los siete municipios del área metropolitana que le han delegado el ingreso de la tasa y que hasta la fecha tan solo cobraban por ella un total de 81.200 euros ya que la empresa se beneficiaba de una bonificación del 95% gracias a una ley del año 1972.
El anuncio lo realizó el propio presidente provincial, Valentín González Formoso, que explicó que por primera vez se liquidará el 100% del IBI a los municipios del área, a excepción de Oleiros.
“O fin da bonificación no IBI da AP-9 implicará para sete concellos da comarca pasar duns ingresos de 81.200 euros a más de dos millóns de euros polo paso da autopista no seu territorio”, dijo el responsable provincial, que recordó que ya a principios de este año había anunciado que el cobro de la tasa iba a ser total, tras la derogación de la bonificación estatal que catalogaba a la vía como Bien Inmueble de Características Especiales.
Por municipios, y según los datos facilitados por la propia Diputación, el más beneficiado será Abegondo, que de 30.000 pasa a cobrar 595.000 euros. Le sigue Paderne, que de 2.400 pasa a 464.000. Bergondo recibirá 303.500; Miño, 230.000; Cambre, 184.000; Betanzos, 137.000 y Culleredo, 119.000.
La ciudad de A Coruña, que al igual que Ferrol o Santiago no tiene delegado el cobro del IBI en los servicios de recaudación en la Diputación, fue una de las primeras en anunciar que se adhería a la derogación de la normativa de época franquista por lo que el incremento de la tasa pasa a ser bastante importante.
El primer teniente de alcaldesa y portavoz del Gobierno local, José Manuel Lage Tuñas, explicaba que, a partir de ahora, Audasa pasará a pagar anualmente 26.257 euros cuando hasta 2023 había abonado tan solo 1.312.
“Non facemos máis que aplicar a Audasa a mesma política que esta lle aplica aos seus usuarios, así que terá que aboar todo o que lle corresponda e contribuir cos seus impostos a mellorar os servizos aos cidadáns”, apuntó Lage, que recordó que la AP-9 sería una autopista libre de peaje si no fuese por la decisión adoptada por Aznar, que firmó una prórroga de la concesión por 25 años, la cual no finaliza hasta 2048.