Podría parecer que los paladares coruñeses están saturados de tortillas, pero siempre hay espacio para probar una más. Es la estrella del tapeo, la reina del pincho, el objeto de deseo de miles de buscadores de la perfección. Y así se entiende que cada vez sean más los locales de hostelería que se definen por este plato. Betanzos tiene la fama, pero A Coruña, la afición.