Los vecinos de Angrois amanecieron sobresaltados ayer por el ruido de unos motores revolucionando sin parar.
El origen del estruendo no era otro que una pequeña exhibición automovilística ilegal en las inmediaciones del parque infantil de esta localidad.
Concretamente, eran tres los coches que se habían citado la madrugada de ayer para hacer derrapes y otros alardes de habilidades al volante.
Según informan desde la Asociación Vecinal de Angrois, se vieron obligados a llamar a la Policía Nacional para que actuase ante estos hechos.
El suceso, tal y como recoge el comunicado que han emitido en sus propias redes sociales, tuvo lugar sobre las 06.45 horas de hoy.
En el mismo, agradecen a las autoridades lo rápido que se desplazaron al lugar para detener la práctica y emprender las acciones legales pertinentes.
Más allá del ruido a horas intempestivas, los vecinos de la parroquia muestran preocupación por la peligrosidad vial que generan estas quedadas.
Además, denuncian que ya había sucedido exactamente lo mismo el pasado martes.