La tercera edición del Congreso Internacional de Finanzas Computacionales (ICCF2019) se inauguró ayer en la sede de la Fundación Barrié con el objetivo de analizar los retos de investigación en el ámbito de las finanzas cuantitativas .

Al acto de inauguración asistieron el rector de la Universidad de A Coruña, Julio Abalde; Carlos Vázquez Cendón, catedrático de Matemática Aplicada de la Universidad de A Coruña y coordinador del Comité Científico de este evento; junto al experto alemán Matthias Ehrhardt, miembro del Comité Científico y catedrático de la Universidad de Wuppertal (Alemania), quien inició esta serie de congresos.

Hasta el viernes, más de cien expertos académicos y profesionales del ámbito de las finanzas cuantitativas y sus aspectos computacionales, de 24 países, se dan cita en este encuentro, en el que se están presentando los últimos avances en temas relacionados con el sector financiero y asegurador. El congreso está organizado por la Universidad de A Coruña; con la colaboración de la Fundación Barrié, Citic, Instituto Tecnológico de Matemática Industrial, European Consortium of Mathematics and Industry, Abanca, Afundación y Risk.net.

Vázquez Cendón señala que “las finanzas cuantitativas necesitan de muchas herramientas matemáticas para calcular riesgos financieros y el valor de productos”.

Entre los asistentes destaca la presencia de Bruno Dupire, quien, después de haber dirigido diversos equipos de investigación sobre derivados financieros en varios bancos, en la actualidad está al frente del equipo de Investigación Cuantitativa en la estadounidense Bloomberg y es profesor en la Universidad de Nueva York. 

En el transcurso del encuentro se puso de manifiesto que los retos actuales en la investigación en finanzas cuantitativas son de varios tipos. Los expertos indicaron que se busca, en particular, encontrar modelos más realistas y que se ajusten a los datos, dar más importancia a la cobertura de las operaciones que a su valoración, mejorar la formación de los operadores financieros; además de asegurarse de que los productos financieros que se crean, promueven y venden sirven a objetivos de la sociedad.