El Río Breogán y el Monbus Obradoiro afrontan este sábado (18:00 horas) en el Pazo dos Deportes de Lugo un derbi de altura en la Liga Endesa, con ambos equipos empatados a siete victorias y el dominio de Galicia y la Copa del Rey de trasfondo.

Después de catorce encuentros disputados en la ACB, los dos presentan el mismo balance, con equilibrio de victorias y derrotas.

Los santiagueses han anotado más (52 puntos de diferencia) pero los lucenses han recibido menos (91) y están por delante en la clasificación.

El Breogán está necesitado de triunfos en casa. Los cuatro últimos que recibió llegaron a domicilio -tres de ellos consecutivos- y en el Pazo no gana desde el 22 de octubre (86-70 al Surne Bilbao Basket). Desde entonces han pasado cuatro equipos por Lugo, todos de la zona alta de la clasificación, y todos salieron ganadores.

Los de Mrsic cogieron vitaminas en Zaragoza (89-90) el pasado miércoles y todos los jugadores celestes están disponibles para medirse a un Obradoiro en forma.

Las opciones de los santiagueses de disputar la Copa del Rey de Badalona pasan, como para el Breogán, por ganar el derbi.

El equipo de Moncho Fernández lo encara con la moral por las nubes después de la épica victoria ante el Manresa, al que tumbó en la prórroga después de levantar una desventaja de seis puntos en el último minuto y medio.

El equipo santiagués viaja a Lugo lanzado, después de ganar cinco de sus últimos seis partidos. El fichaje de Kassius Robertson ha aumentado su potencial ofensivo. El canadiense fue decisivo en los últimos dos triunfos. Firmó 26 puntos ante el Fuenlabrada y 28 ante el Manresa.

De su aportación y de la de los hermanos Thomas y Philip Scrubb dependerán mucho las opciones de victoria del Obradoiro, que viene de un importante desgaste físico ante el conjunto de Pedro Martínez. Moncho Fernández sigue teniendo las bajas del escolta Marcus Paige y el pívot croata Dragan Bender, al que siguen buscando un recambio en el mercado.