El Deportivo sigue avanzando en la pretemporada y la cuarta semana de trabajo comenzó con una nueva sesión táctica en la Ciudad Deportiva de Abegondo.

Tras las tareas de activación y un rondo con desplazamiento, el cuerpo técnico propuso un ejercicio de finalizaciones y una tarea de conservación de balón. Borja Jiménez se llevó en ese momento a sus jugadores al tercer campo para perfeccionar diferentes movimientos de ataque y defensa.

El abulense dispuso un equipo de seis efectivos y otro de cinco. El conjunto herculino crece también en inferioridad.

El míster y sus ayudantes incidieron en la importancia de “llegar en el momento justo” y pidió a los delanteros un plus para complicarles la vida a los centrales.

Defendían Álvaro Trilli, Lapeña, Jaime Sánchez y Alberto Retuerta, con Villares por delante; y atacaban Antoñito, Álex Bergantiños, David Mella, Isi Gómez, Víctor Narro, Mario Soriano y Gorka Santamaría. Borja Granero alternó con los centrales en el equipo al que le tocaba contener y también salir de la presión del rival.  Automatismos que se adquieren en Abegondo y se trasladan después a los partidos. Y en eso, el Deportivo lleva trabajo avanzado, tal y como reconoció el preparador deportivista la semana pasada en su comparecencia ante los medios de comunicación antes del partido con el Castilla y en la resaca del 7-1 ante la Ponferradina en Vilalba.

La sesión que abrió la semana acabó con una serie de partidos en espacio reducido y con la plantilla dividida en tres equipos, aunque algunos jugadores, como Retuerta o Yeremay, repitieron formación. En los verdes iniciaron Villares, Retu, Soriano, Jaime, Gorka y Narro; de amarillo, Antoñito, Lapeña, Jairo, Yeremay y Trilli; y de azul, Jairo, Quiles, Borja Granero, Bergantiños y Mella. El cuerpo técnico incidió en mantener el “orden”.