La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, cumple cuatro años en el cargo y lo hace con las mismas ganas con las que llegó en 2019 aunque defiende que ahora la ciudad ha avanzado gracias a tres ejes de trabajo: “diálogo, liderazgo y gestión”. Inés Rey (A Coruña, 1982) cierra un mandato de “cuatro años con dos de pandemia”, un periodo que define como el “del diálogo y de la amabilidad”, como dice prueba la aprobación de 206 de los 208 asuntos que fueron a pleno.
“El diálogo ha permitido desbloquear proyectos históricos”, defendió en una entrevista en la que defiende que están en marcha, por fin, las obras de regeneración de la ría de O Burgo, el tren al puerto exterior, la remodelación de Alfonso Molina o la ampliación del Chuac, todo acciones que realizan otras administraciones, pero que tienen impacto en la ciudad. “La ciudad ha avanzado en estos cuatro años, precisamente gracias al diálogo, al liderazgo y a la gestión. Tres ejes en los que creo que destacamos para bien. Volvemos a ser un referente en Galicia, pero también en el resto de la península, en nuestras políticas municipales, donde A Coruña recupera el liderazgo que había perdido”, aseguró.
Rey indicó que “tiene un modelo de ciudad” y, por eso, su proyecto no termina y, de hecho, dijo que no ha terminado, en cuatro años. “Me presenté en su momento con un proyecto a medio plazo, un proyecto para los primeros 10 años, donde se inician esos pasos y se tiene que consolidar”, prosiguió. Una de las cuestiones que debe tener, en su opinión, esa continuidad es la movilidad, con una apuesta por el desarrollo sostenible, con aumento de peatonalización y crecimiento de los carriles para bicicletas; y mira también hacia otros retos como “el diseño definitivo de la fachada marítima” de la ciudad. “Buscamos una ciudad más amable, una ciudad más humana en el sentido de que esté pensada para las personas con más espacio para los ciudadanos”, añadió.