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Tengo un idilio con las actitudes conscientes

Tengo un idilio con las actitudes conscientes
Lucía Canabal acompañada de Isabel Merino

Queridos lectores:

 

Hace un mes me casé con mi proyecto, sí, sí, habéis oído bien, y lo celebré por todo lo alto (como cualquier boda merece). Adquirí un compromiso conmigo misma y con todos vosotros, para compartiros y comunicaros mi pasión por las actitudes, un proyecto de vida al que voy a dedicarme en cuerpo y alma a partir de ahora.

 

Me presento: soy Lucía Canabal, mentora en liderazgo consciente a través de las actitudes y estoy aquí para cumplir mi promesa y comunicaros las bondades de una vida liderada por vosotros mismos, ¿para qué? Para ser felices.


He empezado fuerte, lo sé, pero mejor sin anestesia. Mirad, vivimos en un mundo “hiperconectado”, pero a la vez, donde los seres humanos nos sentimos cada vez más solos.


¿Qué entendéis por “estar conectados”? La mayoría me diréis que se trata de la “conexión tecnológica”, que nos facilita la comunicación y nos hace la vida más fácil (ya que todos o casi todos tenemos cada vez más acceso a internet en nuestros hogares, y cada dependemos de ello, empezando por los móviles). 

 

Pero, no me refiero a ese tipo de conexión. ¿A qué conexión me refiero entonces?. Os hablo de conectar con lo que somos, con nuestra esencia, con nuestro ser, con nuestra verdad…algo que hemos olvidado. 


Y mi proyecto va de eso, de conexión con nuestra naturaleza, para ser felices, y descubriros que solo trabajando las actitudes conscientes lo conseguiréis, porque, para mi la actitud es un regalo que tenemos todos para expresarnos en el mundo, y quiero que lo descubráis conmigo.


Como os decía, hace un mes -vuelvo a mi boda- me comprometí a divulgar mi proyecto y mi libro: “El viaje de las 7 actitudes conscientes para liderar tu vida” y hacerlo para conseguir llegar al máximo número de personas posible. 

 

Empecé por convocar a mi familia y amigos en la Fundación Paideia en un acto precioso, con mi querida editora Isabel Merino, con la que charlé largo y tendido para dar a conocer el proceso que me había traído hasta aquí, mi viaje personal, y comunicar mi por qué y mi para qué de mi nuevo paradigma. Mi emoción fue máxima porque por fin iba a compartir con todos aquello en lo que creo, practico y, sobre todo, que me cambió la vida. 

 

Para los que me conocéis desde hace tiempo, yo me relacionaba en mi vida con una única actitud, la conocida como actitud positiva y esta manera de vivir me llevó a evitar y ocultar lo que sentía, ya que me incomodaba mostrarlo (sentimientos como la rabia, la frustración, la ira…). En cambio, me mostraba siempre con “buen rollito” para todos, y eso estaba acabando conmigo.


Poco a poco sentí que esta actitud no era suficiente para mí, que algo fallaba y dediqué tiempo a indagar qué me estaba pasando. Empecé a estudiar, investigar y a empaparme de nuevos conceptos, y sí, ¡tuve una revelación! y ya nada podía seguir igual. Lo encontré, y por eso estoy hoy aquí.

 

Acabé con el “patrón de la actitud positiva” y “la actitud negativa”. Desde entonces, ya no creo en “la vida en blanco y negro”, y quiero que vosotros tampoco. Voy a mostraros “esas nuevas tonalidades” que son las actitudes conscientes y que os ayudarán a “cambiar la mirada” a partir de vuestro día a día. 

 

Mi intención es llegar a muchos corazones, esta es la conexión a la que me refería al principio de este artículo, con los beneficios de este proceso de conocimiento, de este viaje que os propongo que hagamos juntos, para que lideremos nuestras vidas conectadas a la verdad que nos pertenece.  

 

Gracias a este espacio, os plantearé cuestiones, hablaremos de lo que nos preocupa, compartiré etapas de “este viaje”, os proporcionaré píldoras inspiradoras que os ayudarán a reconfigurar vuestro día a día, a elevaros y a reservaros tiempo para vosotros mismos.

 

Ahora, y con la máxima conexión me acerco a mi escritorio y comienzo a teclear todo lo que os quiero transmitir, ya que tengo la fortuna de poder expresarlo gracias a este “rincón” que me ha ofrecido el Ideal Gallego, y en el que os espero.


Como un regalo que es, pondré toda mi creatividad y profesionalidad para llegar a todos vosotros a través de la pasión que siento por difundir las “actitudes conscientes” al mundo. Me comprometo conmigo misma, me comprometo con vosotros. ¿Os animáis a este viaje?. Aquí os espero con la mano tendida.

 

Gracias desde hoy por ser parte de mi proyecto, sin vosotros no sería posible. Un abrazo consciente y recordad que: sin actitud no hay felicidad. 

Tengo un idilio con las actitudes conscientes

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