El caso Mediador sobrevuela en el Congreso y ha abierto una nueva grieta entre el PSOE y algunos de sus socios parlamentarios, que insisten en una comisión de investigación, mientras los socialistas quieren dar carpetazo a un asunto que en las últimas horas está en manos de la Policía de la Cámara, autorizada para entrar en el despacho del exdiputado Juan Bernardo Fuentes Curbelo.
Después de que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, autorizara la entrega a la Policía del ordenador y de “los efectos depositados en el interior del despacho” de Fuentes Curbelo tal y como ha solicitado la jueza que investiga el caso Mediador, el grupo parlamentario socialista da por cerrada la polémica que se ha generado en el interior de la Cámara.
“No hay caso”, ha asegurado el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, que ha recordado que la Policía entrará en el despacho del exdiputado que permanecía cerrado desde que dejó su acta y donde no se ha roto “ningún ordenador a martillazos”.
Sin embargo, Unidas Podemos y otros socios parlamentarios como Compromís, Más País o incluso otros partidos como el BNG piden más contundencia a los socialistas, y mientras los morados urgen que sea el PSOE el que registre una comisión de investigación, las otras formaciones están dispuestas a apoyar la petición del PP.
De hecho los populares han dado hoy un paso más. Aún pendientes de que la Junta de Portavoces analice la semana que viene la comisión de investigación que registraron hace días, este martes han pedido a la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, que apoye una investigación interna para salvar “el decoro” del Congreso.
La vicepresidenta segunda de la Mesa del Congreso, Ana Pastor, ha planteado en la reunión de hoy que el Congreso investigue las visitas de diputados al considerar que “la imagen de todas sus señorías se está viendo vulnerada y atacada por todo lo que ha pasado” con el caso Mediador.
“Queremos saber también si se han destruido pruebas y se ha velado porque eso no se produzca”, ha incidido al tiempo que la portavoz popular, Cuca Gamarra, criticaba que “algunos partidos” que forman parte de la Mesa del Congreso “se pongan de perfil”.
Y mientras Compromís y Más País no hacen feos a apoyar la comisión que pide el PP y la apoyarían sin dudarlo, desde Unidas Podemos se insiste en que es el PSOE el que debe también registrarla.
“Creemos que debe ser el PSOE el que presente una comisión de investigación y nosotros la apoyaremos”, ha dicho el diputado morado y secretario tercero de la Mesa, Javier Sánchez.
El BNG, por su parte, muestra dudas frente a la comisión de investigación de los populares pero insiste en que hasta ahora el PSOE no esta demostrando contundencia para identificar toda la ramificación de esa posible trama de corrupción entre su grupo parlamentario.
“Lo que queda claro es que el único pecado del grupo socialista es que cinco diputados del grupo, ni quince, ni veinte, ni treinta, se fueron a cenar (con Fuentes Curbelo). En mesas separadas y respetando el toque de queda, punto”, ha zanjado Patxi López.
Sin embargo, el grupo parlamentario socialista sí ha abordado el caso Mediador por primera vez en la reunión que habitualmente tienen los martes para “cerrar filas” con diputados “injustamente” señalados.
En este sentido, fuentes del PSOE inciden en que más de una decena de diputados tienen previsto emprender acciones legales para defender su honorabilidad aunque apuntan que el camino a seguir es pedir en primer lugar el derecho de rectificación, luego tratar de llegar a una conciliación por vía administrativa y ya en última instancia presentar una querella por la vía penal.