El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha descartado actos del partido en este momento en los que participe su antecesor, Pablo Casado, ya que, según ha explicado, su nueva actividad profesional “no es compatible” con la vida política. Según ha dicho, le parece “razonable” que no pueda implicarse en la actividad política “al menos durante un tiempo”.
Así se lo trasladó durante el almuerzo que ambos celebraron este miércoles en un céntrico restaurante de Madrid próximo al Senado, según ha relatado Feijóo a los periodistas en Daimiel (Ciudad Real), tras visitar la empresa García Carrión, acompañado del presidente del PP de Castilla-La Mancha, Paco Núñez.
“Está enfocado y centrado en una actividad profesional y esa actividad profesional, según me ha dicho, no es compatible con la actividad política, cosa que entiendo y además me parece razonable e inteligente”, ha declarado Feijóo, al ser preguntado si hablaron de incorporarle en actos del partido a medio plazo.
Feijóo, que ha enmarcado en la “normalidad” ese almuerzo porque la relación es “cordial”, ha insistido en que el nuevo trabajo de su antecesor --en un fondo de inversión vinculado a la Defensa-- requiere en este momento “no mezclarla con la actividad política”.
En cualquier caso, ha dicho que si en algún momento Casado tuviera compatibilidad para participar en actos políticos, “iría a aquellos sitios donde se le invitara, como no puede ser de otra forma”.
“No vamos a lugares donde no nos invitan”, ha sentenciado. En los últimos días, desde ‘Génova’ han repetido que son los candidatos electorales los que deciden sus campañas y quienes participan en ellas.
A preguntas de los medios sobre esa incompatibilidad, Feijóo ha explicado que esa actividad profesional internacional de Casado “requiere independencia partidista”. “Por tanto, no puede hacer actividad política, al menos durante un tiempo”, ha apostillado.
Preguntado entonces si no le vio con ganas de volver a la política, el líder del Partido Popular ha dicho que no es “intérprete” de Casado y ha añadido que se limita a decir lo que le trasladó en ese encuentro “sin más”.
“En mi partido hablar con exdirigentes no está prohibido. Y como no hay ningún tipo de mala conciencia con nadie, pues yo hablo con todos los exdirigentes que ha tenido mi partido si les parece bien mantener un contacto conmigo y a mi me parece oportuno hacerlo. En este caso se produjeron las dos cuestiones. A él le interesa hablar conmigo y que a mi me parezca interesante y oportuno hablar con el, ha manifestado.
Dicho esto, Feijóo ha recalcado que “no hay nada que ocultar” ni hay “ninguna cuestión pendiente”. “Simplemente hubo un congreso, no se presentó nadie y la gente votó”, ha recordado, para subrayar que “un congreso democrático en partido democrático es lo normal para sustituir a un líder”, ha aseverado.
La comida entre Feijóo y Casado ha coincidido en el tiempo con el primer aniversario de la profunda crisis interna que vivió el PP tras estallar la guerra entre Casado y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. De hecho, en la madruga del 24 de febrero de 2022, el anterior presidente del PP pactó su salida con los ‘barones’ territoriales de partido.
Sin embargo, Feijóo ha explicado que ese almuerzo estaba fijado para la pasada Navidad pero como consecuencia de su agenda y la propia “agenda internacional” de Casado no ha podido celebrarse hasta este miércoles.