El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, aseguró que el PP tiene una “divergencia importante” con Vox en Extremadura que les separa del acuerdo “al menos de momento”.
Así lo afirmó tras la toma de posesión de la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Al ser preguntado si mantiene que con un 12% Vox tiene derecho a entrar en los gobiernos autonómicos, Feijóo precisó que de las nueve comunidades en las que el PP tenía posiblidades de gobernar, está gobernando en cinco en solitario y no ha necesitado el apoyo de Vox.
En otra, en referencia a Valencia, recordó que probablemente gobernarán con el partido de Santiago Abascal por que sí lo necesitan; en otras dos, señaló, están negociando sus compañeros en referencia a Baleares y Aragón, mientras que en Extremadura “no ha sido posible”.
En referencia en concreto a esta última comunidad, Feijóo explicó que “ha habido una divergencia importante” que les separa “al menos de momento” de conseguir un acuerdo.
Dicho esto, quiso dejar claro que el PP negocia con la Constitución y los estatutos de cada comunidad en la mano, mantienen sus principios y compromisos electorales, son “coherentes” con los resultados de las urnas, “proporcionados” en sus decisiones y respetan a los ciudadanos. Además, precisó que es cada parlamento autonómico el que ha de decidir quién es el presidente de esa comunidad y las Cortes Generales, si se trata del presidente del Gobierno.
Ante estas declaraciones, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, no dudó en calificar de “teatrillo” la falta de acuerdo entre PP y Vox para formar gobierno en Extremadura y se mostró convencido de que después de las generales llegarán a un pacto porque ambas formaciones “son lo mismo”, indicó.
Bolaños dice que no sabe cuánto durará esta situación pero cree que “intentarán prolongarlo” hasta después de las generales. “Desde luego no doy ninguna credibilidad a ese teatrillo y sí me preocupa enormemente que no conozcamos los pactos ocultos que tiene el Partido Popular y Vox”, ha trasladado.
En este sentido insisitió en que ambas formaciones son lo mismo y lo están demostrando con sus acuerdos en Aragón o la Comunidad Valenciana, explicó en declaraciones a los medios de comunicación a la entada de un acto sobre Derechos Humanos en la Fundación Ortega y Gasset-Gregorio Marañón.
Además recordó que la prueba es que en comunidades donde el PP “numéricamente no necesita a la ultraderecha” como Madrid y Cantabria, mencionó, los de Alberto Núñez Feijóo “asumen políticas extremistas”.
“No nos llevemos a engaños, seamos conscientes que el Partido Popular y Vox son lo mismo. Tan lo mismo son que cuando no necesita el Partido Popular a Vox, como es Cantabria, como es Madrid, también asume las políticas extremistas de Vox”, insistió.
En el mismo sentido, la ministra Portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, denunció que el PP ha cambiado “principios por sillones” al pactar con Vox y alertó de que el partido de Santiago Abascal entra en estas instituciones cuando no cree en el Estado autonómico.
Así lo hizo en declaraciones desde la Puerta del Sol, donde asistió a la toma de posesión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, del PP.
Al ser preguntada por el acuerdo de los de Alberto Núñez Feijóo con Vox para la Mesa de las Cortes de Aragón, la ministra Portavoz ha recriminado “a qué precio” lo firmó el PP, si al de asumir los postulados de la “ultraderecha” y renunciar a avances para las mujeres como la lucha contra la violencia de género y la igualdad.
“Si es para retroceder en eso, pues claramente es una decepción. No para nosotros, que ya intuíamos que el Partido Popular había comprado y hecho suyos esos argumentos, sino que habrá mucha gente que les votó y se sienta especialmente decepcionada cuando ve que cambian principios por sillones, cuando ve que los pactos implican la pérdida absoluta de sus derechos”, cargó la ministra socialista.
Por otra parte, la también ministra de Política Territorial defendió que “debe existir” una “lealtad especial” y colaboración entre el Gobierno central y las comunidades.
Y señalo que asistía a la toma de posesión de Ayuso en señal de la “lealtad especial que debe existir con los gobiernos de las comunidades”.
Una asistencia, apostilló “en coherencia” con el trabajo de “necesaria colaboración leal” que el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha tenido con “todas” las comunidades en esta legislatura, en la que se han sucedido “tantos acontecimientos” importantes como la pandemia.
Mientra, en Extremadura, el presidente de la Junta en funciones, Guillermo Fernández Vara, aseguró que no tendría “ningún problema” en plantear al PP un acuerdo de gobernabilidad para la región, al tiempo que dijo a esta formación que “o gobierna o deja gobernar”.
Fernández Vara reconoció que en estas últimas semanas está manteniendo conversaciones con la presidenta del PP de Extremadura, María Guardiola, algo que consideró “lógico y obvio” entre personas que, con independencia de las diferencias que puedan tener, son “responsables”.
“El PP tiene que ser consciente de que una cosa y la contraria no puede ser, o gobierna o deja gobernar pero lo contrario es una irresponsabilidad, desde luego llevar a Extremadura a unas elecciones creo que además lo pagarían y lo pagarían caro”, dijo en una entrevista en RNE.
Así, y sobre si cree que puede haber un proyecto compartido aunque éste sea de mínimos entre el PP y el PSOE para evitar nuevas elecciones, dijo que hay aspectos que se pueden compartir “sin duda ninguna” y, de hecho, “así ha sido históricamente”.
De este modo, recordó que en España ha habido alternancia entre los dos partidos y políticas que han hecho unos y otros que, cuando hubo cambios, se mantuvieron. “Con lo cual es perfectamente posible que eso pudiera ser una realidad”, apuntó.
En este sentido, Fernández Vara insistió en que en el contexto actual en Extremadura solo hay dos opciones, “que gobierne la lista más votada o que haya un pacto PP-Vox. No hay ninguna otra opción”.
Así, dijo que, como un pacto entre PP y Vox “ha saltado por los aires porque se han volado todos los puentes posibles”, la única opción que hay es que gobierne a la lista más votada, en este caso la del PSOE, por cierto, dijo, “tal como ha venido diciendo el P a lo largo de este mes”.
Al respecto, recordó que la única ocasión en España en la que se cumplió que gobierne a la lista más votada fue cuando el PSOE se abstuvo para que Rajoy tuviera la presidencia y no ir a unas nuevas elecciones. “Unos predican y luego otros son los que acaban dando el trigo”, apuntó.
También, y preguntado por con quién intentaría gobernar si el PP le facilitara ese acceso a la presidencia de la Junta, Vara recordado que en 2015 gobernó sin tener mayoría y sacó adelante dos presupuestos con el PP y otros dos con Podemos.
Asimismo, y a preguntas de si volvería a ser candidato en el caso de que se repitieran las elecciones, Fernández Vara dijo que “uno nunca se propone”. “Si los compañeros deciden que sea así yo lo seré y si deciden que no lo sea pues no lo seré, pero serán ellos los que lo decidan”, aseveró.
De la misma manera, Vara hizo hincapié en que su “indignación” en estos momentos viene porque está “convencido” de que el PP y Vox están “experimentando cómo van a relacionarse” después de las elecciones nacionales y están tomando “como rehén y como cobaya” a los extremeños.
“Eso, de verdad, que es lo que más me molesta de todo esto, tener la sensación, además, de que a nadie le importa nada. Cuando la responsable del PP, la señora Guardiola, dice que si hay que ir a elecciones se va, como si diera igual que vayamos a estar sin gobierno hasta el mes de enero del año que viene, como si diera igual que se pierdan 400 millones de fondos europeos, como si diera igual que el inicio del curso escolar sea de una manera o sea de otra, me parece una gravísima irresponsabilidad”, aseveró.
María Guardiola, aseguró hoy que la dirección nacional de Vox “ha frenado el cambio” en la comunidad, aunque “todavía está a tiempo” de revertir la situación.
En sus redes sociales, dijo que el vicepresidente político de Vox, Jorge Buxadé, “vino a Mérida a dar instrucciones a los suyos para que no me dejaran gobernar”.
Por su parte, el candidato de Vox, Ángel Pelayo Gordillo, señaló que fue el PP el que “ha entregado la Asamblea al Partido Socialista por no llegar a un acuerdo” con su partido.