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martes | 26 noviembre | 2024
El Parlament catalán ha tumbado este miércoles los presupuestos de la Generalitat para este año, al prosperar las enmiendas a la totalidad presentadas por JxCat, Vox, la CUP, En Comú Podem, Cs y PPC, después de fracasar la negociación del Govern de Pere Aragonès con los comunes por el escollo del Hard Rock, lo que deja ahora mismo la legislatura catalana en el limbo.
Tras un pleno tenso y lleno de reproches cruzados, las enmiendas a la totalidad a los presupuestos han cosechado un total de 68 apoyos, frente a los 67 votos en contra de ERC y PSC-Units.
Incluso la votación se ha visto rodeada de polémica, ya que Cs ha protestado por el hecho de que la Mesa del Parlament haya permitido contabilizar el voto telemático del diputado de JxCat Lluís Puig.
Prueba del malestar en las filas del Govern por el fracaso de las negociaciones para obtener los apoyos que le faltaban es que el presidente catalán, Pere Aragonès, ha renunciado a tomar la palabra en el pleno y solo ha intervenido la consellera de Economía y Hacienda, Natàlia Mas, en un discurso inicial de menos de una hora.
El rechazo del Parlament a tramitar los presupuestos deja tocado al Govern de Pere Aragonès, que ahora tiene en sus manos decidir si adelanta las elecciones catalanas, previstas en principio para febrero de 2025, aunque varios grupos de la oposición piden que las anticipe.
De hecho, durante toda la mañana, en los pasillos del Parlament diputados de los diferentes grupos especulaban con la posibilidad de que Aragonès convoque inmediatamente elecciones, algo que fuentes del Govern no confirman ni desmienten.
De nada ha servido que el Govern haya ampliado su oferta a En Comú Podem para alcanzar un pacto presupuestario, abriéndose a última hora a estudiar moratorias a proyectos turísticos que movilicen más de 100 litros de agua por persona y día: no ha convencido a los comunes, que consideran que eso no afectaría al Hard Rock.
En su intervención inicial, la consellera Mas ha acusado a los comunes de "incoherencia y electoralismo" por centrar el debate en un proyecto privado con casinos y hoteles, el Hard Rock, que "nada tiene que ver con las cuentas catalanas".
La líder de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, ha reafirmado el 'no' de su grupo a los presupuestos ya que las ofertas que les han hecho llegar en las últimas 24 horas son "un brindis al sol" y "papel mojado", además de "un insulto a la inteligencia".
La portavoz del PSC-Units en el Parlament, Alícia Romero, ha cargado contra el "electoralismo" de los comunes y ha subrayado que en las cuentas no hay ninguna referencia al Hard Rock.
Por su parte, el presidente del grupo de JxCat, Albert Batet, ha trasladado una última oferta a Aragonès, aunque lo ha emplazado a adelantar las elecciones catalanas si no presenta "una propuesta clara de presupuestos".
El portavoz parlamentario de Vox, Joan Garriga, ha rechazado rotundamente el proyecto de presupuestos, ha denunciado el "infierno fiscal" que, a su juicio, hay en Cataluña y ha reclamado un "gran recorte" del gasto público de la Generalitat.
El portavoz adjunto de la CUP en el Parlament, Xavier Pellicer, ha acusado a Aragonès de servir a los intereses del Gobierno español: "No sabemos si el señor de Pedro Sánchez en Cataluña es Salvador Illa o es usted".
El líder de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha arremetido contra unas cuentas que ha tildado de "electoralistas", mientras que el presidente del PPC, Alejandro Fernández, ha rechazado el proyecto presupuestario porque "no responde a las verdaderas necesidades" de los catalanes.
