El exlíder del PP de Cataluña Alejo Vidal-Quadras, que sufrió el pasado 9 de noviembre un disparo en la cara en Madrid, ha criticado el poco interés que mostró el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por su estado de salud tras el “ataque terrorista” que sufrió y le acusa de “envilecer” a España.
“El holograma que habita La Moncloa puso un tuit. Esa es la España de Sánchez. Para delincuentes enemigos del orden constitucional, amnistía, parabienes y zalemas, para un leal servidor del Estado, veinte años en la Universidad, once en el Parlamento de Cataluña, cuatro en el Ayuntamiento de Barcelona, cuatro en el Senado y quince en el Parlamento Europeo, un tuit mientras agoniza tras sufrir un ataque terrorista. No se puede envilecer más un país”, ha criticado en una columna que ha publicado este domingo en ‘Voz Pópuli’.
En este sentido, el exlíder catalán del PP acusa a Sánchez, al que define como “el presidente progresista aliado y amigo de terroristas y prófugos sediciosos”, de poner a España “a la altura de su mínima estatura moral” y le tilda de “pigmeo ebrio de ambición sin mérito y corto de lecturas”.
Vidal-Quadras compara el interés de Sánchez con el de José María Aznar o el del actual líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, quienes se pusieron a disposición de la familia de la víctima, pese a no tener relaciones “idílicas”. “Es conocido que mis relaciones con Aznar y Feijóo no han sido idílicas, pero todavía hay clases. Ambos llamaron a mi familia para darles palabras reconfortantes y ponerse a su disposición”, ha indicado.
En este sentido, recuerda que esto ocurría mientras él se “desangraba” en el quirófano del Hospital Gregorio Marañón y un equipo de “élite” de la sanidad pública “reunido con admirable urgencia luchaba con denuedo” por salvarle la vida. Vidal-Quadras agradece el trabajo realizado de los cirujanos, anestesistas, personal de enfermería, instrumentistas, auxiliares y celadores.
“Tengo tanto que agradecer durante estos días transcurridos entre el ominoso disparo y hoy que no sabría por donde empezar. En primer lugar, el amor a su profesión de un grupo increíble perfectamente conjuntado, cirujanos, anestesistas, personal de enfermería, instrumentistas, auxiliares y celadores. En segundo lugar, los numerosos especialistas de la UCI, de los que no tengo una imagen nítida mientras iba y venía en la barca de Caronte perdido en una nebulosa a medio camino entre este mundo y el definitivo”, ha alabado.