Lo que parecía un simple desacuerdo vecinal por el uso de las zonas comunes acabó en una intervención de la Policía Local de Lugo. En la madrugada del pasado sábado 26 de octubre, una patrulla acudió a un edificio de la zona norte de la ciudad tras recibir el aviso de una familia que aseguraba haber sido amenazada por sus vecinos. ¿La causa? Ropa tendida en el pasamanos de la escalera.
Al llegar al lugar, los agentes confirmaron que el conflicto giraba en torno a una colada que colgaba de la barandilla de las escaleras, algo que no fue bien recibido por otros vecinos del edificio. Según la Policía, lo que comenzó como una discusión sobre el peculiar uso de las áreas comunes escaló hasta llegar a agresiones verbales, e incluso físicas.
Para evitar que la situación se saliera aún más de control, los agentes identificaron a los cuatro vecinos implicados y redactaron el correspondiente informe. Ahora, están a la espera de que los afectados presenten las denuncias pertinentes para que el caso pueda ser remitido al juzgado de guardia.
Por el momento, el vecindario del edificio espera que, de cara a futuras coladas, se encuentren métodos más pacíficos para resolver los conflictos.