Hoy, día 11 de noviembre, se celebra el Día Mundial del Churro, una ocasión perfecta para rendir homenaje a este dulce. Este manjar, hecho a base de harina, agua y sal, se fríe en abundante aceite y puede disfrutarse en el desayuno, la merienda o en cualquier momento del día, especialmente acompañado de un chocolate caliente. Desde GastroIdeal te contamos cuáles son las mejores propuestas de la ciudad:
1. Croissantería Churrería Núñez
Con más de 35 años de historia, la Croissantería Churrería Núñez es un referente para disfrutar de chocolate con churros en A Coruña. Ubicada en el número 12 de la calle Vicente Ferrer, este establecimiento ha construido una fiel clientela gracias a su larga tradición y dedicación en ofrecer un churro de excelente calidad.
Esta pequeña churrería, situada en el número 18 de la calle Ramón y Cajal en el barrio de Cuatro Caminos, cuenta con un espacio acogedor y una clientela leal que no duda en recomendar sus churros. Además de sus deliciosos productos, El Timón también ofrece servicio de “take away”, lo que permite disfrutar de los churros en casa o en cualquier lugar de la ciudad.
Bonilla a la Vista es el imprescindible de la lista. Cuenta con presencia en varios puntos de la ciudad, en calles como Real, Galera, Barcelona y Juan Flórez, haciendo fácil para cualquiera encontrar una ubicación cercana. Sus churros, junto con su famoso chocolate espeso, hacen que cada visita a Bonilla a la Vista se convierta en una experiencia gastronómica inolvidable. Perfecto para desayunar o merendar, y siempre con la calidad que caracteriza a este emblemático local.
Está ubicada en el número 11 de la calle Juan Díaz Porlier. Este establecimiento ofrece no solo churros, sino también porras, gofres, tostadas y bollería, acompañados de chocolate, café o infusiones, adaptándose así a los gustos de cada cliente. Además, ha ganado popularidad por incluir en su menú las porras, una variante de churro poco común en A Coruña.
5. Churrería Oriental
Con el lema “Tradicionalmente buenos”, la Churrería Oriental, situada en Federico Tapia, ofrece churros clásicos y opciones sin gluten, algo especialmente valioso para los intolerantes a esta proteína. Además de sus crujientes churros, el chocolate caliente que sirven es otra razón para visitar este establecimiento.