Cuando escuchamos la palabra Totoro, es inevitable pensar en el entrañable espíritu del bosque de la película de animación japonesa de 1988, dirigida por Hayao Miyazaki y producida por Studio Ghibli. Ahora, ese nombre también evoca un destino culinario en A Coruña: Totoro Sushi, un restaurante buffet ubicado en el centro comercial Marineda City, que promete una experiencia gastronómica inspirada en las ricas tradiciones de la cocina asiática.

Totoro Sushi no es un buffet convencional. Los clientes tienen a su disposición una tablet en cada mesa para realizar sus pedidos de manera cómoda y personalizada. Con más de 150 platos en el menú, este restaurante tiene opciones para todos los gustos y necesidades dietéticas. Desde los clásicos de la gastronomía japonesa como nigiris, sashimi y ramen, hasta platos más innovadores como hosomakis fritos con queso y fruta o yaki bao (pan al vapor con pollo frito y salsa teriyaki). 

El sushi y el sashimi ocupan un lugar privilegiado en el menú, con opciones como el nigiri mixto, que incluye una selección de piezas clásicas, o el sashimi mixto, una cuidada combinación de pescados crudos frescos y de alta calidad. Los amantes de los platos calientes también encontrarán, entre otros platos, tataki de ternera, gyozas de pollo a la plancha o yaki bao, un pan al vapor relleno de pollo frito con una irresistible salsa teriyaki. Y si se trata de caldos, las diferentes variedades de ramen, como el de pollo frito o el de tempura de gambas, son una apuesta segura. Para quienes prefieren los sabores intensos del wok, destacan la ternera salteada, las gambas picantes o los fideos de arroz con vegetales. 

El broche de oro lo ponen los postres, con una selección que incluye mochis de múltiples sabores —chocolate, coco, mango o incluso tarta de queso—, los tradicionales dorayakis rellenos de chocolate y una variedad de helados y tartas heladas.

El menú infinity

Una de las propuestas más atractivas de Totoro Sushi es su menú infinity, que permite a los comensales disfrutar de una experiencia “sin límite”. Por un precio fijo, cada persona puede pedir hasta cinco platos por ronda, tantas veces como desee, siempre que termine lo que ha pedido. Esta política busca promover un consumo responsable y evitar el desperdicio de alimentos: los platos no consumidos o los que dejen más del 60% sin terminar conllevan una penalización de 2€ por plato.