Miles de alumnos retomaron este lunes sus clases en la provincia sureña marroquí de Al Haouz, la más afectada por el terremoto del pasado 8 de este mes, que dañó un tercio de sus 774 instituciones educativas y dejó a 30.000 niños sin aulas.
El director provincial del Ministerio marroquí de Educación, Mohamed Zerrouki, explicó a EFE que estos niños, que forman parte de los 151.326 alumnos que estudian en la enseñanza fundamental (hasta el bachillerato) en la provincia, reanudaron sus clases de forma gradual a través de cuatro fórmulas alternativas.
Zerrouki detalló que estos estudiantes reciben sus clases en las aulas que no están dañadas en sus escuelas o fueron trasladados a otras instituciones en la misma provincia, mientras que 6.000 de ellos fueron enviados, de forma provisional, a la ciudad de Marrakech, donde reanudaron sus clases.
Afirmó que las autoridades garantizaron a estos alumnos comida, transporte y alojamiento en Marrakech, entre otros tipos de ayudas.
La otra medida alternativa fue el establecimiento de 200 tiendas de campaña equipadas con todo el material necesario para la operación educativa en las aldeas siniestradas, y que serán sustituidas con aulas prefabricadas a la espera de la reconstrucción y la restauración de las escuelas dañadas.
El responsable marroquí lamentó que 33 instituciones educativas de la provincia de Al Haouz se derrumbaran de forma completa durante el seísmo que causó casi 3.000 muertos.
Asimismo, subrayó que su departamento está proporcionando apoyo social y psicológico a los alumnos para que vuelvan a integrarse con calma y tranquilidad en el proceso pedagógico.
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sábado | 21 diciembre | 2024
