Unidades de la PolicÍa de Investigaciones (PDI) chilena buscan al astrónomo británico Thomas Marsh, de 61 años, desaparecido desde que el pasado 14 de septiembre llegara al observatorio La Silla, en la localidad septentrional de Coquimbo y en los límites del desierto de Atacama, propiedad del consorcio internacional European Southern Observatory (ESO).
El astrofísico llegó a Chile ese día en compañía de un estudiante de primer año de doctorado de la Universidad de Warwick (Inglaterra), que se ha convertido ahora en la pieza clave de la investigación, ya que fue la última persona que lo vio.
Al parecer, y según detalles de las pesquisas que se han difundido a través de la prensa local, ambos tuvieron una discusión antes de la noche del jueves 16 de septiembre, fecha en la que tenían que haberse presentado en el telescopio TNN.
La única pista que manejan los investigadores son las llaves de la habitación de Marsh, que se encontraron tiradas en la calle, en el trayecto hacia el Observatorio, y el relato del estudiante, de 23 años, que ya ha abandonado Chile con la promesa de seguir colaborando con las autoridades.
“El testigo está disponible para todas las diligencias de la investigación, pero en relación con su ubicación, no la puedo señalar”, explicó a la prensa el fiscal del caso, Adrián Vega.
El pasado 29 de septiembre, la hija de astrofísico, Tabitha Marsh, lanzó un desesperado mensaje en las redes sociales y pidió la máxima difusión del caso para poder encontrar a su padre.
“Muchas gracias a todos los que han compartido esto hasta ahora, por favor sigan compartiendo. Dos semanas y todavía nada. Queremos desesperadamente que vuelva a casa”, afirmó.
Una búsqueda por tierra, mar y aire en la que participan efectivos del Ejército, la PDI y el cuerpo de Carabineros, además de personal del Ministerio Público.
Según este institución, el estudiante ha sido fundamental en la investigación, siendo el primero en informar de la desaparición de Marsh y ha entregado importantes antecedentes.
“La búsqueda continúa hasta que se agoten todas las posibilidades. Estos no son tiempos definidos y se analizará una vez que se agoten todos los medios y eso no ha sucedido. Entonces no se puede dar un plazo o una proyección del tiempo que estaremos en la búsqueda del ciudadano británico”, explicó Vega.
Se trabaja con la hipótesis de que el astrónomo sigue vivo, ya que no hay indicios sólidos para pensar lo contrario, explicó el fiscal del caso.
El Observatorio Europeo Austral en Chile, que tiene un estatus legal propio con privilegios de tipo diplomático, autorizó de inmediato las investigaciones y sus autoridades han entregado apoyo logístico, como alimentación y alojamiento, a todo el personal que está trabajando en un área de más de 300.000 hectáreas.
Cuenta con dieciocho telescopios, de los cuales cinco fueron construidos por la organización Observatorio Europeo Austral, mientras que otros se mantienen en parte por la ESO