El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó hoy en Kiev que no se puede predecir cuándo terminará la guerra, pero que la alianza atlántica seguirá apoyando a Ucrania "el tiempo que sea necesario" y que ese país tiene "derecho" a formar parte de la alianza atlántica.
"No sabemos cuándo terminará esta guerra, pero sabemos que la agresión rusa sigue un patrón tóxico que es preciso interrumpir", dijo en una rueda de prensa con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Es por ello que los países de la OTAN han proporcionado 65.000 millones de euros de ayuda militar a Ucrania desde el inicio de la invasión y están suministrando ahora "más aviones de combate, tanques y vehículos acorazados", recordó Stoltenberg.
"A Ucrania le corresponde por derecho un puesto en la familia euroatlántica. A Ucrania le corresponde por derecho un puesto en la OTAN. Y nuestro apoyo os ayudará a hacer esto posible con el paso del tiempo", enfatizó el secretario general de la OTAN.
Stoltenberg señaló que en este sentido, durante su encuentro con Zelenski, abordó con éste una "iniciativa de apoyo plurianual" que ayudará a Ucrania a realizar la transición del equipamiento y las doctrinas de la época soviética a los estándares occidentales y garantizar la interoperabilidad con la OTAN en términos militares.
"La OTAN está con vosotros hoy, mañana, y el tiempo que sea necesario", destacó.
De cara a la próxima cumbre de Vilna, el secretario general indicó que la cuestión de la integración de Ucrania en la OTAN y de las garantías de seguridad por parte de sus integrantes ocuparán un lugar destacado en la agenda.
Todos los aliados están de acuerdo en que el futuro de Kiev está en la OTAN, aseguró, pero matizó que la prioridad es que Ucrania "prevalezca" en la guerra, ya que sólo así seguirá siendo una nación independiente y tendrá sentido plantear su ingreso en la alianza.
"Las puertas de la OTAN siguen abiertas. Y por eso, lo que hacemos, el apoyo que proporcionamos a Ucrania, hace posible una futura membresía de Ucrania", aseveró.
Zelenski, por su parte, manifestó la expectativa de que durante la cumbre en Vilna, que según dijo será un "evento histórico", se anuncien pasos "específicos y concretos" sobre el futuro de Ucrania en la OTAN, algo para lo que no existe "una barrera objetiva" que lo impida.
"Necesitamos algo mejor que el formato de relaciones actuales", declaró el mandatario ucraniano.
Zelenski puso énfasis en que Kiev no aceptará una "alternativa" ni una "solución de compromiso" que sustituya el ingreso en la alianza, un mensaje que según dijo va dirigido a "aquellos líderes de países que buscan permanentemente compromisos para la membresia [de Ucrania]".
"Seremos miembros de la alianza", recalcó, y pidió que hasta que ello ocurra la OTAN extienda garantías de seguridad", algo que "si surge la posibilidad" podría ocurrir ya en Vilna.