Centenares de personas se dieron cita ayer en el puerto oleirense de Lorbé para dar buena cuenta de más de un millar de centollas que puso a la venta la Cofradía de Pescadores en la octava edición de la Festa Gastronómica da Centola. El único pero al evento, en absoluto achacable a la organización, fue la escasez de producto de lo cual se alertaba en innumerables carteles colocados en las vallas de acceso al recinto portuario. Esta circunstancia limitó, al contrario de lo sucedido en ediciones pasadas, la venta de marisco para consumo a domicilio.

Este contratiempo, no obstante, no impidió que el certamen gastronómico al igual que siempre fuese un éxito de público. Desde primera hora agentes de la Policía Local de Oleiros establecieron un dispositivo especial de tráfico. Así, el tramo de carretera que enlaza la rotonda de la Vía Ártabra con el puerto se transformó en un improvisado estacionamiento que a mediodía estaba completamente ocupado, mientras que el acceso al muelle quedó restringido para vehículos autorizados.

Visitas de políticos 

Como no podía ser de otro modo, el evento contó con la presencia de políticos locales y autonómicos. Uno de los primeros en llegar fue el alcalde, Ángel García Seoane, que mostró su satisfacción porque finalmente la cita gastronómica pudiese haberse llevado a cabo después de que el pasado fin de semana se aplazase, en principio, sine die.

También estuvo presente el conselleiro do Mar, Alfonso Villares, que destacó la excelente calidad y sabor de la centolla gallega así como el buen estado biológico que presenta en aguas gallegas, ya que en la pasada campaña de 2022-2023 se comercializaron cerca de 636.000 kilos de este crustáceo generando una facturación de seis millones de euros.

Felicitación

El responsable de este departamento autonómico felicitó a los promotores de la organización. También quiso poner en valor la importancia de desarrollar este tipo de celebraciones que animan el consumo y que, según él, sirve para homenajear la flota de artes menores que lo captura en la zona aprovechando que el domingo, día 12, se abrió la campaña en las provincias de A Coruña y Pontevedra.

Cabe indicar que los asistentes, a pesar de las limitaciones indicadas anteriormente, también pudieron degustar el producto en los restaurantes de la localidad que habitualmente participan en el certamen: A Escola, Casa Méndez, A Cortiña y A Coviña.