El Gobierno ha decidido crear un comité para la verdad. Al parecer, se trata de detectar y hacer públicos los bulos que propaga la oposición y, por ende, los medios de comunicación. Decía hace unas horas un tuitero con mucho acierto que el primer bulo es la propia creación de ese comité de expertos en bulos. Bromas aparte, hay que tener mucho desahogo para que el presidente, en primera instancia, y todos sus ministros hablen de bulos y mentiras, cuando ya la propia moción de censura que Sánchez ganó expulsando a Rajoy del Gobierno estuvo basada en una mentira. Después vinieron centenares y así siguen. Para mí, la penúltima tiene que ver con unas declaraciones de Pedro Sánchez a la cadena norteamericana CNBC con motivo de su presencia en el Foro de Davos. En ellas, además de ponerse estupendo porque la inflación ha bajado más que en otros países de la Unión Europea, el crecimiento económico es mayor y la creación de empleo fortísima, olvida Sánchez que España es de los pocos países que aún no ha recuperado los niveles de riqueza anteriores a la pandemia, que somos el país donde más poder adquisitivo se ha perdido, que los costes para las PYMES han escalado un 23% y las ventas apenas un 14,3%, que los precios de la alimentación se acercan al 16%, que la inflación subyacente alcanza el 7% o que el gasto en prestaciones por desempleo ha crecido un 10,4% pese a la bajada del paro que no es tal, si tenemos en cuenta los cientos de miles de trabajadores con contrato fijo discontinuo que, pese a estar en paro, no figuran como tales.
Asegura también el presidente en esa entrevista que la buena marcha de la economía se debe a las reformas realizadas y a los fondos europeos, cuando hasta la UE está poniendo en cuestión la correcta aplicación y ejecución de los miles de millones que nos han llegado de Europa. Tan es así, tantas son las dudas, que el próximo mes llegará a España una delegación de la Oficina Presupuestaria del Parlamento Europeo para ver qué está pasando y dónde está el dinero. Ha insistido también Sánchez desde Davos en el firme compromiso del Gobierno con la consolidación fiscal. Según el último dato publicado ayer por el Banco de España, la deuda pública alcanzó en noviembre los 1,5 billones, con un aumento interanual del 5,6% y 79.227 millones de euros. Es decir, el 116% del PIB. Además, la AIReF ha subido una décima, hasta el 4,5% del PIB, el déficit público de 2022. Tampoco parece que en este terreno se estén haciendo bien las cosas. Parece que el comité de la verdad tiene en estas declaraciones del presidente mucho material para iniciar sus trabajos. A ver si es verdad que se crea y no ocurre como con el comité de expertos de la pandemia del que nunca se supo.