La Comisión de seguimiento y evaluación de los Acuerdos del Pacto de Estado en materia de Violencia de Género del Congreso aprobó la creación de una subcomisión para la renovación y actualización del Pacto suscrito en 2017 y cuya vigencia finaliza este año. La medida fue impulsada por el PSOE y se sumaron todos los grupos parlamentarios, salvo Vox, que votó en contra.

Este organismo estará formado el seno de la Comisión para el seguimiento y evaluación del Pacto estará formado por quince miembros, que serán los responsables de redactar el informe pertinente. Los trabajos deberán completarse en el período de sesiones de febrero a junio de 2023.

Acuerdo en noviembre

Estos trabajos llegan un año después de que el Gobierno y todos los grupos parlamentarios, excepto Vox, firmaran un dictamen en el Congreso con trece medidas que renovaban el Pacto de Estado.

Este texto consensuado, establece la obligación de aprobar cada cinco años una Estrategia Estatal frente a la violencia contra las mujeres, como marco de política pública que ponga las bases para el desarrollo efectivo de la normativa sobre la materia; y hacer permanente el Plan Estatal de Sensibilización y Prevención.

Durante el debate, la portavoz socialista Lidia Guinart aseguró que se trabajó de manera “intensa” desde el Gobierno y desde el Congreso para que el Pacto pasara de ser “un compendio de medidas a una realidad transformadora”. A su juicio, los avances normativos son “incontestables”, las cifras de asesinatos se redujeron sensiblemente, y las denuncias se incrementaron.

Transparencia y superación

La portavoz del PP, Marta González lamentó la “falta de transparencia absoluta” en la ejecución del Pacto y trasladó la “alarma” que algunas asociaciones de mujeres le transmitieron cuando hicieron su propio seguimiento: “El dinero se ha gastado en objetos y material superfluo, efímero, inservible para el objetivo previsto, como servilletas, bolsas, mascarillas, etiquetas de vino, gorras, botellas, frascos de hidrogel. Todo ello con la ilusoria pretensión de luchar contra la violencia y con la nada ilusoria pretensión de hacerse propaganda”. En todo caso, pidió aparcar las diferencias para conseguir un consenso.

Desde Podemos, Isabel Franco defendió que desde la firma del acuerdo el Gobierno se esforzaron por materializar las medidas del Pacto y superarlas. “Ni nuestro país ni la sociedad es la misma de 2017, tras un 8M absolutamente paradigmático y la hegemonía del movimiento feminista. Actualizar el pacto es clave”, recalcó.