El teletrabajo es un factor significativo para los hombres a la hora de implicarse en las tareas del hogar y el cuidado de los hijos, mientras que en el caso de las mujeres no marca la diferencia, según un estudio del Observatorio Social de la Fundación “la Caixa”.
Son datos del estudio “Teletrabajo después de la pandemia. Análisis desde la perspectiva del trabajador”, liderado por las investigadoras de la Universidad de Barcelona (UB) Marta Curull y Laia Maynou, junto con Lídia Farré, del Instituto de Análisis Económico del CSIC y la Barcelona School of Economics.
El proyecto de investigación se llevó a cabo en mayo de 2022, dos años después del primer confinamiento por la pandemia de covid, con el objetivo de analizar la nueva normalidad laboral y, concretamente, la normalización y efectos del trabajo desde casa.
Los resultados del estudio, en el que participaron 4.000 personas de entre 25 y 50 años a través de un cuestionario, revela que el 30 % de los hombres que teletrabajan, al menos un día a la semana, declara implicarse más en las tareas domésticas, mientras que solo el 18 % de los que trabajan siempre de manera presencial hacen la misma afirmación.
En este sentido, la proporción de varones que contribuyen a estas tareas más que sus parejas es 12 puntos porcentuales superior que entre el grupo de hombres que no teletrabajan.
En cambio, entre las mujeres apenas hay cambios: el 51% de las que teletrabajan y el 50% de las que no lo hacen declaran implicarse más que sus parejas en este tipo de tareas domésticas.
El cuidado de los hijos
En cuanto al cuidado de los hijos, el 48 % de las mujeres que teletrabajan aseguran contribuir más en el cuidado de los hijos, mientras que el 47 % afirma hacerlo en una proporción similar, cifras que también son prácticamente iguales a las mujeres que trabajan fuera de casa.
Entre los hombres que trabajan desde el hogar, al menos un día a la semana, el 24 % afirma hacer más que sus parejas en las actividades de los niños, el 59 % asegura contribuir en una proporción similar y el 17 %, menos.
Entre los que no hacen teletrabajo, solo el 12 % de los varones contribuye más que sus parejas, el 66 % declara hacerlo en una proporción similar y el 22 %, menos.
Así, hay una diferencia de cinco puntos (del 17% al 22%) entre los varones que contribuyen menos y que hacen teletrabajo frente a los que trabajan fuera de casa.
"El teletrabajo está asociado a una mayor participación en la producción doméstica por parte de los hombres", ha destacado la investigadora y coautora del estudio Lídia Farré.
Los resultados del estudio del Observatorio Social de la Fundación “la Caixa” también constatan que hay trabajadores que están dispuestos a renunciar a una fracción de su salario a cambio del “home office”, aunque la probabilidad de disminuye progresivamente a medida que aumenta la penalización salarial.
En el momento en que se realizó la investigación, el 36% de los encuestados hacía trabajo telemático, con mayor incidencia entre los que tienen estudios universitarios.
Aunque los resultados sugieren que el género no afecta significativamente en la incidencia del teletrabajo, sí que confirma que el nivel educativo y la composición del hogar son determinantes en este sentido, destacando la brecha entre quienes tienen un título universitario y los que no.
En cuanto a la valoración de los teletrabajadores respecto a su nueva realidad laboral, cerca del 90 % están de acuerdo en que el trabajo a distancia mejora el equilibro entre las responsabilidades familiares y personales.
Estos también valoran positivamente la posibilidad de reducir costes y la mejora de su bienestar emocional.
En este sentido, la investigadora Lídia Farré asegura que “si el tiempo que los trabajadores ahorran en desplazarse al trabajo lo dedican a actividades familiares o de ocio, es de esperar que su bienestar emocional aumente”.