La ministra de Sanidad, Mónica García, ha confiado este jueves en que haya un consenso sobre el plan antitabaco que hoy presentará a las comunidades en la Comisión de Salud Pública, en el que se plantea la ampliación de los espacios en los que se prohibirá fumar y vapear, para lograr un país libre de humo.
"Espero que salga un consenso para ser un país libre de humo y que la siguiente sea una generación libre de humo", ha resaltado la ministra a los medios antes de comparecer en el Senado para explicar las líneas generales de su departamento.
Este jueves se reúnen los responsables de Salud Pública del Ministerio y de las comunidades para analizar, entre otros asuntos, el "Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo (PIT) 2024-2027", que aspira a reducir la prevalencia y evitar la introducción en el hábito tabáquico, especialmente de los jóvenes.
Para ello propone ampliar las prohibiciones en "determinados ambientes comunitarios y sociales al aire libre y en ciertos espacios del ámbito privado, especialmente aquellos con presencia de menores".
También considera fundamental ser conscientes de las nuevas formas de consumo de nicotina a través de cigarrillos electrónicos y el tabaco calentado, que quiere equiparar al convencional regulando "la venta y consumo tanto de los dispositivos que utilicen líquidos, cartuchos o recambios con nicotina como los que no.