Las mujeres y niñas son las víctimas en el 70 % de los homicidios en los que el agresor es la pareja o expareja íntima, según un informe de la ONU que advierte de que el número de feminicidios puede ser mayor y que prevenirlos requiere disponer de más datos para comprender la magnitud y complejidad de estos crímenes.
En su Estudio Global sobre Homicidios, publicado este viernes en Viena, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) denuncia que "las mujeres y las niñas se ven desproporcionadamente afectadas por la violencia homicida en la familia, perpetrada por la pareja u otros miembros de la familia".
Así, el 56 % de todas las mujeres asesinadas lo fueron a manos de parejas, exparejas o familiares, un porcentaje que puede ser mucho más alto, dado que casi en la mitad de los homicidios registrados en los que la mujer es la víctima no se especifica qué tipo de relación tenía con el agresor.
De hecho, la ONUDD reconoce que los feminicidios, es decir el "asesinato de mujeres y niñas por razones de género", muchas veces no son registrados como tales.
"Para prevenir y poner fin a los asesinatos de mujeres y niñas por razones de género, es necesario comprender la magnitud de este delito y desentrañar su complejidad", indica.
Además, el estudio señala que la "dimensión de género" en la violencia dentro de la familia es aún más evidente si se consideran sólo los homicidios cometidos por parejas o exparejas.
"En estos casos, las mujeres y las niñas soportan una carga aún más desproporcionada, ya que representan una media de 7 de cada 10 (71 %) de todas las víctimas de homicidios cometidos por la pareja en los 75 países y territorios sobre los que se dispone de datos", sentencia la ONUDD en su análisis.
Ese dato contrasta con que las mujeres son víctimas en sólo el 20 % de homicidios en términos generales, lo que confirma que el propio hogar sigue siendo el lugar más peligroso para mujeres y niñas.
En su informe, la ONUDD señala que la brecha entre las cifras de hombres y mujeres víctimas de homicidios depende en gran medida de los factores o motivos que impulsan esos crímenes en cada país.
Así, en países con elevadas tasas de homicidios, los asesinatos de hombres a manos de otros hombres se producen a menudo entre miembros de grupos criminales y suelen ser el principal tipo de violencia homicida.
Por contra, en zonas con tasas bajas de homicidio, las muertes dentro de la pareja o de la familia suelen suponer un porcentaje mayor de los asesinatos en general.
Este tipo de homicidio es predominantemente el resultado de la violencia de hombres contra mujeres, dice la ONU, que indica que es un fenómeno que se repite en todas las regiones del mundo.