Para la Xunta, se trata de aprovechar todos los recursos que ofrece la era digital para avanzar en la administración electrónica. Para los trabajadores de los juzgados, tan solo “un gesto” con el que el Gobierno gallego intenta “vender” la imagen de un mayor control sobre el funcionariado y, de paso, perpetuar esa idea de los trabajadores públicos como incumplidores.

Ambas partes se refieren a la implantación del nuevo sistema de control horario que los funcionarios de los juzgados de A Coruña comenzarán a utilizar el próximo 1 de febrero, y que les permitirá fichar desde sus ordenadores, gracias a una tarjeta “inteligente” que tiene entre sus funciones registrar su hora de entrada y de salida.

El mecanismo, que ya opera en juzgados como el de Betanzos y en la sede administrativa de la Xunta en Santiago, es sencillo. La Secretaría Xeral de Modernización e Innovación Tecnolóxica les ha hecho entrega a los trabajadores de este documento, que les acredita como funcionarios públicos. Lo que tendrán que hacer es insertar su tarjeta en el lector que posee el teclado de sus ordenadores e introducir una clave personal en el Programa Kronos, para activar después el momento de llegada al puesto de trabajo y la hora de salida.

“A implantación de Kronos permitirá superar a falta de homoxeneidade que existe actualmente na administración autonómica no sistema de control horario”, destacan desde la Xunta, antes de señalar que ese control es solo una de las múltiples funciones de la tarjeta, que permite la firma digital del trabajador público y, sobre todo, da un paso más en el expediente digital al que aspira la administración de justicia.

Desde el sindicato SPJ-USO, el mayoritario entre los trabajadores de este ámbito, apenas ven diferencia entre el nuevo sistema y el que se empleaba hasta ahora, mediante un dispositivo que se activaba con tarjeta a la entrada del edificio, aunque creen que habrá algunas demoras derivadas de los fallos de los equipos informáticos o dependiendo del lugar de trabajo de cada uno.

La “pega” se la pone el delegado de USO en A Coruña al gasto de una nueva aplicación informática en un momento en el que los recursos escasean: “Es un gesto absurdo, cuando falta dinero para bolígrafos”.

En la Xunta lo ven de otro modo y señalan que, a la larga, el sistema permitirá, con los datos “tomar decisións”, amén de facilitar el telebrabajo y la flexibilidad horaria de la plantilla.