Desde una tortilla con patata con grelos y chorizo, del mesón Moncho, a una muselina de bacalao con tomatina de pasas, tosta de malta y brocheta de patata, del Jazz Café, los miembros del jurado del concurso de tapas “Picadillo” saborearon ayer hasta doce especialidades finalistas que se inspiraron en la cocina de pote, las del apartado tradicional, y se fueron a los vértices más arriesgados de la gastronomía en el caso de la creativa.
Aunque su veredicto no se conocerá hasta el 7 de octubre, los expertos recorrieron la ruta de los bares nominados con el propósito de aupar al mejor en los dos campos. Entre ellos, se encontraban los propios nietos del que le da nombre al certamen, Carmen Fernández-Gago Puga y Luciano Puga. Así es que de Monte Alto, en concreto, del Cúrcuma Tapas, salieron con un codillo al horno con repollo salteado en el estómago, para irse a una reina de las tapas, en el Culuca, la ensaladilla, y probar el bacalao a la gallega de la taberna del Arriero.
En la modalidad inspirada en el recetario popular, El Descansillo intentó convencer con un pincho de huevo con caldo de cocido y patata de Coristanco y Lamaripepa con delicias de picadillo de chorizo con huevos de codorniz. Dentro de la nueva cocina, Yéboles quiso innovar con “La galleguiña” y Oído Cocina colocó la carne de cochinillo en un rulo y lo aderezó con espuma de hongos.
El jurado realizó parada de avituallamiento en Spoom donde les presentaron un taco de ossobuco asado con crema de patata y trufa y en Narigas Manjares, los sentidos se recrearon en pan y pulpo salsa de piquillo.
Por último, Lamaripepa probaba suerte también en la parte experimental con delicias del país con salsa de ortigas. De las doce tapas preparadas por los once establecimientos, los especialistas elegirán dos, que se subirán al podio junto a una tercera, que saldrá de una votación popular.
Esta última se llevará el Premio Ciudad de A Coruña. Los tres ganarán 1.500 euros cada uno y el prestigio de hacerse con una distinción como la del Picadillo.
En este sentido, la convocatoria batía récords este año con 64 locales adscritos y un total de 84 platos repartidos entre tradición y probetas con forma de pincho, un 23% más de los que concurrieron en 2013. n