La Fundación Curemos el Parkinson recibió el premio Social de Trastornos del Movimiento por su labor en difusión. El vicepresidente, neurólogo en el Chuac, Diego Santos, habla sobre este reconocimiento y el parkinson.
¿Qué sintieron al recibirlo?
Satisfacción porque una de las labores de la Fundación es difundir el conocimiento de la enfermedad. A través de la web tenemos una actividad centrada en la investigación, pero también un portal específico que se llama “Conoce el parkinson” para los pacientes y familiares. Lo importante es saber que podemos ayudar, aunque solamente sea a un paciente.
Entonces, ¿qué es el parkinson?
Una enfermedad neurodegenerativa, la segunda más frecuente después del alzheimer, que genera una discapacidad progresiva.
¿En qué franja de edad se da?
La enfermedad es muy variable, puede debutar a edades tempranas o en pacientes de edad avanzada; sin embargo, hay más pacientes entre los 50 y 70 años.
¿Qué síntomas tiene?
Temblores y afectación de aspectos motores, como problemas para caminar o lentitud de movimiento. Además, aunque hay bastante desconocimiento, son frecuentes la depresión, apatía, problemas cognitivos, dolor o fatiga.
¿Qué estadios tiene?
Uno inicial, donde la enfermedad solo afecta a un lado del cuerpo; mientras que en el estadio dos la afectación es bilateral. En el tercero hay, además, problemas del equilibrio, mientras que en los dos últimos ya se asocia con situaciones de mayor dependencia. En realidad, la quinta, el paciente va en silla de ruedas sin poder deambular.
¿Cuántos diagnósticos pueden hacerse anualmente en el Chuac?
Es un área que abarca 500.000 pacientes, de los cuales se tratan más de 1.000 casos.
¿Se puede prevenir?
Se ha demostrado que un ejercicio aeróbico de cierta intensidad en la edad media de la vida, sí que reduce el riesgo de desarrollar la enfermedad del parkinson.
Con respecto a la dieta, una vez que tienes la enfermedad, ¿hay que modificarla?
En estadios iniciales no hay grandes aspectos a considerar. Lo que si es importante es hacer una dieta sana, equilibrada, sin abusar de las grasas y la sal. En estadios más avanzados es importante tener en cuenta que si un paciente traga mal, a lo mejor, debe tomar suplementos específicos nutricionales o una dieta más blanda o triturada. También, en pacientes con fluctuaciones clínicas se deben evitar grandes consumos de proteínas porque puede dificultar la absorción de la medicación y sea menos efectiva.
¿Existe predisposición genética?
El porcentaje de causa genética, a nivel global, no es muy alto, podríamos hablar de un 15%. Los factores genéticos son importantes, sobre todo, cuando debutan en edades jóvenes –entre 30 y 50 años–.
¿Qué papel juegan los cuidadores?
Son un aspecto clave. Muchos pacientes van a consulta acompañados por algún familiar, tanto en estadios más avanzados, como iniciales. Los familiares también son importantes a la hora de proporcionar información para que el neurólogo lo tenga en cuenta en los ajustes de tratamientos.
Líneas de investigación.
Dirigidas al diagnóstico más precoz, estudio de la progresión de la enfermedad, conocer las causas o aspectos implicados en su origen y los tratamientos.