Según transcurren los días se va conociendo datos en relación a una supuesta implicación de tres acosadores de una menor de edad en A Pobra con la desaparición en la misma localidad de Diana Quer, aunque todavía faltan por encontrarse las evidencia que acaben por vincular definitivamente a todos o a alguno de ellos. Ayer trascendió que uno de esos individuos, en concreto, al que se identificó por su tez morena, ser alto, tener un tatuaje en un hombro y que era el que llevaba la voz cantante en ese trío con la persecución, insultos, amenazas y agresión a la muchacha de 17 años, conocía a la joven madrileña. De hecho, parece ser que se trata del mismo hombre que ya fue interrogado por efectivos de la Guardia Civil, que lo consideran como una persona de interés para la investigación, tras saber que se había relacionado con la adolescente de Pozuelo de Alarcón y que se juntara alguna vez con ella para fumar porros.
Según ha podido saber este periódico, se trata de un individuo que ronda los 30 años y que es natural de Marruecos, aunque lleva residiendo desde hace algunos años en Riveira, en donde ha trabajado en el sector hostelero y estuvo empleado en otros sectores durante algunas temporadas. Algunas personas que lo conocen o que tuvieron alguna relación con él indicaron que parece una persona tranquila, pero que desde hace unos meses a esta parte empezó a darse a la “mala vida” y señalaron que no le auguran un buen futuro atendiendo los derroteros por los que se está conduciendo. De hecho, añadieron que desde fue llamado a declarar ante los investigadores lo ven cabizbajo y con el semblante bastante más serio.
En relación al acoso al que ese individuo y sus dos acompañantes sometieron a la menor de edad, que puso esos hechos en conocimiento de la Guardia Civil tras saber de la desaparición de Diana Quer, se ha sabido que el hombre estuvo persiguiéndola desde que esa muchacha se encontraba en el entorno del parque de O Castelo y fue huyendo de él para que no la siguiera molestando. Uno de los momentos críticos se ese acoso se vivió delante del escenario de la orquesta que amenizaba la verbena del Carme dos Pincheiros, en la Praza Segundo Durán. Ahí fue donde el joven de nacionalidad marroquí supuestamente la acechó aún más, la insultó, la amenazó y la agarró del brazo en el que ella tenía su teléfono móvil con el que pretendía llamar a su madre para solicitarle su auxilio.
Ese terminal fue a parar al suelo en el forcejeo y le rompió la pantalla. La chiquilla consiguió soltarse y escapar del lugar en dirección hacia los jardines Valle-Inclán -donde los vieron poco después-, mientras sus amigos se dirigían al acosador y a sus acompañantes para recriminarles su actitud. Afortunadamente, la situación no fue a más, pero los amigos de esa menor de edad llegaron a creer que esos individuos trataron de vengarse posteriormente y confundieron a su amiga con Diana Quer, a la que sospechas que hicieron desaparecer.
Para la chiquilla de 17 años esa no fue la última vez que vio a su acosador, pues lo reconoció desde la ventana de su aula del instituto al verlo pasar por la calle, y luego lo identificó sin ningún género de dudas al mostrarle la Guardia Civil una foto de él que se capturó de las imágenes de las cámaras de vigilancia de un local hostelero de O Areal, y un día después en un álbum fotográfico junto a la de otras personas. Por si eso fuera poco, hace poco más de una semana que la muchacha se llevó la desagradable sorpresa al recibir una solicitud de amistad en su perfil de Facebook y era de ese mismo varón, en lo que a todas luces parece ser una nueva muestra del acoso al que somete a la joven.