Una de las principales líneas de investigación sobre la desaparición en A Pobra de Diana Quer y que se inició casi desde un primer momento gracias al importante testimonio de una menor de edad, a la que la Guardia Civil le ha dado la máxima credibilidad, empieza a dar resultados. Uno de los tres individuos que esta muchacha de 17 años indicó que la habían acosado y agredido sexualmente en el entorno de los jardines Valle-Inclán y la Praza Alcalde Segundo Durán, de la villa pobrense, escasas horas antes de que se le perdiera de vista a la joven madrileña ya está perfectamente identificado.
Tal y como se indicó desde que se tuvo conocimiento de las manifestaciones de esa víctima, se trataría del individuo con un tatuaje en un hombro, alto y de tez morena, entre otros rasgos. En la labor para saber de quien es ese hombre resultó determinante que la menor de edad lo identificó sin ningún género de dudas en una fotografía que se le mostró después de que ella acudió al cuartel de la Benemérita a comunicar que lo acababa de ver en la calle a través de una ventana del instituto en el que cursa sus estudios, y que fruto del impacto que le causó sufrió un atraque de ansiedad. El hecho de que la imagen que le mostraron procediese de una captura de una grabación de las cámaras de seguridad de un establecimiento hace pensar que ese individuo no estaba fichado por los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado.
Lo que todavía no han conseguido los encargados del resolver lo que le sucedió a la hija mayor de Juan Carlos Quer y Diana López-Pinel son las pruebas que le relacionarían o que determinarían su grado de implicación con lo sucedido a la hermana de Valeria. En el caso de que se lleguen a obtener esas evidencias que lo pudieran incriminar, a buen seguro que no se tardaría en ordenar se su busca y captura para proceder a su detención, toma de declaración en dependencias policiales y su presentación ante la autoridad judicial que entiende de este procedimiento, el Juzgado Primera Instancia e Instrucción Número1 de Riveira.
Teniendo en cuenta que la menor de edad acosada y agredida sexualmente indicó en sus testimonios que junto a esa persona iban otros dos, desde la Guardia Civil se está trabajando en la identificación de ambos con los detalle sobre la descripción que les ofreció la referida muchacha. Por el momento, no ha trascendido si se han dado pasos para saber de quienes se trata, pero la adolescente pobrense llegó a aportar datos, entre los que se supo que le parecían brasileños o portugueses por el acento, uno de ellos era más bajo y regordete y el tercero, que estaba separado, tenía mirada desafiante. Una vez lleguen a identificarlos, también deberán reunir las pruebas para relacionarlos con lo sucedido a Diana Quer y su grado de implicación.