Elvira Ferrer vive en medio de una vorágine hace seis meses, cuando se convirtió en la vicepresidenta y directora ejecutiva de la Fundación Ingada, el Instituto Galego para el Déficit de Atención y Trastorno Asociados). Ferrer es médico de familia e hizo del TDAH su causa cuando descubrió que sus dos hijos, de 11 y 14 años, lo padecían. Ahora ella y el resto de los miembros fundadores de Ingada llevan una agenda frenética del que hasta ahora el punto culminante ha sido la gala inaugural que celebraron la semana pasada.
¿Cómo se embarcó en esta aventura?
Es un tema que a nivel personal me afecta. Pero mi situación es un poco privilegiada y cuando conocía otra gente que tenía el mismo punto de vista que yo, entre todos decidimos formar un equipo en el que nos complementamos.
¿Y es tan importante como para crear una fundación?
Afecta a una media de uno de cada veinte niños, entre un 5% y un 7%, y a un 4% de la población adulta, porque es un trastorno que continúa toda la vida. Y suelen aparecer otros trastornos asociados que lo perjudiquen, depresión, problemas de conducta, de personalidad...
A simple vista, un déficit de atención no parece algo tan grave.
No es que sea grave de morirse, pero puedes tener una muy mala calidad de vida.
¿Qué es lo peor que puede pasar?
Pues se sabe que en los centros de menores uno de cada cuatro tienen TDAH. En las cárceles, por ahí, aunque yo diría que aún más. También es facilísimo caer en el consumo de drogas.
¿Cómo se llega a eso?
El hecho de que tengas riñas constantes, que te digan que todo lo haces mal, que eres malo. Tienes que agradar a alguien ¿Con quién te vas juntando? Con los que menos te convienen.
¿Todo eso por no prestar atención?
Es el que el TDAH también suele ser muy impulsivo: no piensa antes de actuar. Siempre quiere probar cosas nuevas, lo que puede tener grandes beneficios. Los ejecutivos con TDAH son muy buenos para tomar decisiones rápidas.
Así que los TDAH son también impulsivos ...
Y también sufren hiperactividad. Pueden tener más o menos impulsividad o hiperactividad, pero déficit de atención lo tienen todos. Pero eso no quiere decir solo que “no me entero en clase”.
¿No?
No. Supone que llego tarde a las citas, no sé planificar ni organizar... El TDAH tiene una sensación del tiempo errónea. Cree que una hora le da para mucho, así que nunca hace las cosas por anticipado.
¿Y a nivel social?
El trastorno genera problemas de pareja, con amigos, porque pueden llevar a ser muy disrruptivos.
¿Es fácil de diagnosticar?
Es fácil si conoces la enfermedad, pero no hay un TDAH igual a otro. Y también es muy difícil encontrar un TDAH puro. Eso solo ocurre cuando se le diagnostica de nño pero de mayor te encuentras que es un TDAH y tiene ansiedad o trastorno negativista desafiante o consumo de drogas o delincuencia.
Supongo que en su caso, siendo médico, fue más fácil.
Relativamente, porque en mi época no era una patología que se estudiara con detenimiento, como la diabetes. Algunos compañeros no lo identifican porque no es algo que genere curiosidad.
Pero es un trastorno aceptado por la comunidad médica.
Bueno, aún hay alguna persona que duda, que cree que solo son unos niños maleducados y padres sin disciplina, o que es el mundo de hoy, que no hay normas. Aunque su aceptación es cada vez más amplia. Y es que realmente existe una alteración cerebral. Pruebas objetivas hay pero no aportan nada porque el problema no es el TDAH.
¿No?
No, porque hay gente con TDH que tienen un gran éxito profesional y sin este trastorno, no habrían llegado a ser lo que son.
¿Entonces puede ser positivo?
Sí, porque si se lo quitas pierden gran parte de su potencial, porque es un TDAH adaptado. El enfoque de la fundación es que el TDAH no es un problema, es un tesoro. Lo que tienes que valorar es si le hace infeliz o evita que tenga tanto éxito como podría.
¿Y si es así?
El tratamiento farmacológico en los TDAH significativos es fundamental. Si en sus genes tiene grabado un problema que evita que sus glándulas cerebrales generen una sustancia, no hay otro remedio.
Así que el TDAH es genético.
Tiene un 80% de carga genética.
Lo habitual es que si hay un niño con TDAH uno de sus padres o sus tíos lo tenga.
Así que, en su caso...
Podría decirse que yo tengo rasgos de TDAH... Hay algo que se llama TDAH adaptado. El apoyo que recibes de niño es clave.
¿Qué clase de apoyo?
Sobre todo, límites. Un TDAH necesita que le marquen el camino a seguir porque si tiene tiempo libre, se pierde. Debe tener claro lo que tiene que hacer en cada momento del día, por su concepción del tiempo. Así que hay que fraccionarle las tareas.
Como madre estará curtida.
Sí, pero eso no significa que estés satisfecha. Como padre, tienes que aprender a filtrar y decidir qué es lo que no les vas a pasar nunca y lo que les vas a permitir.
¿Por ejemplo?
En mi casa tiene un castigo severo encender fuego o andar descalzo por el cuarto de baño. En cambio, no es tan grave cuando dejan caer algo al suelo.