Venus es el nombre del programa de la fundación María José Jove que pone al alcance de menores que han sido víctimas de violencia de género, de entre tres y trece años, el apoyo de perros de terapia para mejorar su autoestima y reducir su ansiedad a la hora de acudir a los juzgados a declarar o a realizar algún trámite. Este proyecto piloto de la fundación y la Asociación pola Igualdade e a Coeducación (Apico) junto con Cadamín se desarrolló en el Juzgado de Violencia contra la Mujer de Betanzos y consiguió que los niños redujesen su estrés, además de mejorar su comunicación familiar, su sueño y los resultados escolares. Los ayuntamientos en los que se comenzó el proyecto fueron los de Betanzos y Curtis, a los que ahora se suman Cambre y Miño debido a la incidencia de la problemática objeto del proyecto detectada en estos ayuntamientos cercanos, que cederán un local para las sesiones con los menores. Los perros de apoyo con los que se trabaja son Bosco, Pot, Uva y Matilda.
“En la Fundación trabajamos desde 2013 en el ámbito de la Terapia Asistida con Animales de Compañía (TAA) con proyectos de ocio o de salud en menores. Y el tiempo viene demostrando los beneficios que aportan”, reconoce Felipa Jove.