Durante cerca de media hora, el tráfico en la calle de San Andrés y las vías aledañas sufrió un colapso que, según los testigos, se debió a un coche camuflado de la Policía Nacional, que aparcó en la esquina con la rúa Nova. El incidente tuvo lugar a las ocho menos cuarto de la tarde y, según la Policía Local, alteró gravemente el tráfico en la zona centro, sobre todo porque paralizó los buses que circulan por esa arteria vital .
Dos inspectoras de la Policía Nacional viajaban a bordo del vehículo, un Peugeot 308 gris, que estacionó en la parada de bus de la esquina de rúa Nova por razones que se desconocen. Es allí donde gira a la izquierda por la rúa Alta el bus número 11, que es articulado. La presencia del vehículo policial impedía el giro, así que tuvo que detenerse. Detrás de él venían más autobuses que también tuvieron que frenar y esperar, mientras el embotellamiento crecía.
Aunque los agentes municipales no han querido declarar sobre este aspecto, testigos presenciales comprobaron como el salpicadero del vehículo lucía una identificación de la Policía Nacional y tomaron numerosas fotos. Media hora después, las inspectoras volvieron al lugar donde había dejado el vehículo, para encontrarse con la congestión de tráfico.