La Audiencia Provincial ha fijado para mañana el inicio del juicio contra siete personas, como presuntos integrantes del llamado “clan de los Mundos”, un entramado que en año 2005 dominaba la distribución de cocaína y hachís en la zona de Carral. Entre los acusados se cuenta, además de la supuesta líder y sus tres hijos, el joven carralés que en abril de 2009 acabó con la vida de su amigo David Pérez al descerrajarle un disparo en la cabeza cuando veían juntos un partido de la Liga de Campeones .

Un jurado le absolvió en 2011 del delito de asesinato del que fue acusado, al considerar la mayoría de sus miembros que aquel disparo fue fortuito. Esta vez, el joven se enfrenta a una petición de pena de diez años de prisión, al tener indicios la Fiscalía que él es una de las personas que se dedicaban a vender a pequeña escala la droga que le suministraban otros procesados desde un bar y una peluquería del municipio.

Los cuatro familiares son, a ojos de la acusación pública, los promotores de aquel negocio ilegal, que la Policía desmanteló al registrar uno de sus domicilios y decomisar un kilo y medio de cocaína. Para ellos se piden penas de más de 13 años de cárcel.