El proyecto de O Parrote estará listo en marzo de 2014. El párking y el edificio de usos hosteleros se podrán utilizar ya ese mismo año, pero para la apertura del túnel habrá que esperar. Según el presidente de la Autoridad Portuaria, no se podrá circular por el mismo hasta que no esté construido el de La Marina, cuya conclusión está prevista para 2015, aunque el proyecto todavía no salió a licitación. Por el momento, el subterráneo se empleará como entrada y salida del aparcamiento, a la altura del castillo de San Antón. Al mismo tiempo, será este último el único acceso que se habilite por ahora, ya que para poder entrar a través de Puerta Real también habrá que esperar a que se reordene la circulación en la zona.
El presidente del Puerto acompañó ayer al concejal de Urbanismo, Martín Fernández Prado, en una nueva visita a las obras, de las que ya se ejecutaron el 50%. Fernández Prado aseguró que la financiación del subterráneo de La Marina, 16,5 millones de euros, está garantizada a través de los fondos municipales y de los dos millones que aportará el Puerto, aunque en el Ayuntamiento siguen buscando un socio que colabore económicamente. Por su parte, Losada reiteró que la intención de la Autoridad Portuaria es licitar el proyecto de La Marina en septiembre para que las obras empiecen este año.
La visita a la zona de trabajo tenía como objetivo pisar, por primera vez, el párking de O Parrote. Ya están construidas las plantas -1 y -2 del aparcamiento entre Puerta Real y el baluarte, y muy avanzada la parte del párking más próxima a la Solana. Dispondrá de 610 plazas.
Losada explicó que los operarios –90 en la actualidad– se centran estos días en los trabajos para finalizar el muro pantalla que delimita el recinto, desde Puerta Real hasta San Antón, y en la construcción del vial subterráneo. Este discurrirá pegado al mar a la altura de la planta -2 del párking. El techo del mismo se aprovechará para habilitar más plazas de aparcamiento.
En cuanto al edificio de usos hosteleros, al lado de La Solana, comenzará construirse después del verano. Será un inmueble “liviano, con fachada de vidrio”, según el Puerto. La única parte del plan que falta por licitar es el proyecto para la revalorización de la muralla, que la Autoridad Portuaria gestionará y pagará al margen. El coste de los trabajos es de 1,2 millones de euros y estarán listos en un plazo de cuatro meses desde su adjudicación. En la zona ya está marcado el camino por el que podrán discurrir los visitantes para ver el baluarte, entre el párking y los restos arqueológicos.